El ciclo positivo de los precios internacionales de los commodities de los metales ha beneficiado no sólo a las compañías mineras, sino también a sus trabajadores con incrementos sustanciales en los salarios y en bonos de productividad.
De acuerdo a un estudio realizado por la Cámara Minera de México (Camimex), se menciona que en los dos últimos años las empresas mineras han repartido utilidades sin precedentes a sus trabajadores e incrementos salariales importantes.
La industria minera reportó que los trabajadores perciben salarios base entre 4.3 y 7.1 salarios mínimos en promedio, sin incluir conceptos de bonos de productividad y otras prestaciones, las cuales llegan a duplicar su salario.
La Camimex indicó que adicionalmente, el reparto de utilidades ha alcanzado el equivalente de hasta 3.2 años de sus percepciones en efectivo. Un trabajador que percibe alrededor de 7 mil pesos mensuales por bonos y utilidades, su salario puede ascender a 15 mil pesos.
El estudio arrojó que la industria minera se ha colocado a nivel nacional con salarios competitivos similares a los de sectores de servicio como el turismo.
De acuerdo a la Camimex, las compañías mineras también mantienen programas de apoyo a vivienda, pago total a servicios básicos como agua, luz y gas, así como atención medica y educativa en las diferentes regiones donde operan.
El director general de Camimex, Sergio Almazán, declaró que “el entorno internacional nos ha permitido crecer las inversiones y beneficiar directamente a los trabajadores en sus salarios, bonos y utilidades. La comunidad minera está consciente de que nuestra industria está determinada por los precios internacionales de los metales. Trabajadores y empresas hemos atravesado por prolongados ciclos negativos, en los cuales nuestra industria se ha contraído y el compromiso de las empresas, en esos casos, siempre ha sido mantener las fuentes de empleo”,
No obstante a este buen escenario laboral, los paros ilegales que ascienden a más de 200 en el periodo correspondiente a 2000-2008, se han traducido en pérdidas para empresas y trabajadores, ya que estos últimos se han visto afectados en la suma de utilidades, bonos de productividad y sus salarios por los días no trabajadores, los cuales dejan de percibir.
Por ello, Almazán declaró que “consideramos que la determinación de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social respecto al Sindicato Nacional Minero es el primer paso para alcanzar la certidumbre laboral, indispensable para el desarrollo del sector. La aplicación estricta de la Ley será fundamental para reestablecer la paz laboral, necesaria para el correcto funcionamiento de nuestra industria”.
De acuerdo a la Camimex, la industria no ha contado en los últimos años con la certidumbre y la estabilidad laboral que les permita desplegar toda su potencial en nuevas inversiones y ello ha repercutido en el bienestar de los trabajadores y de las comunidades.
