El Papa Benedicto XVI prepara para este 2008 una serie de cambios de alto nivel entre los obispos de México, de los cuales destaca la renuncia del cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez.
Según el Anuario Pontificio editado por El Vaticano, que contiene el registro de todos los prelados del mundo, actualmente en México esperan ser nombrados ocho nuevos obispos (cuatro en diócesis 'vacantes' y otros cuatro que ya presentaron su dimisión).
Mientras en este año 2008 deberán entregar su renuncia, por haber sobrepasado el límite de edad de 75 años permitido por el Código de Derecho Canónico ñla ley máxima de la Iglesia-, otros siete representantes eclesiásticos del país.
Por esta razón en los próximos meses el nuncio apostólico en esa nación latinoamericana, Christophe Pierre, deberá coordinar las labores de sustitución de, al menos, unos 15 miembros del episcopado.
En la actualidad cuatro demarcaciones católicas carecen de responsable, se trata de Tlaxcala (tras la muerte de Jacinto Guerrero Torres en diciembre de 2006); y Aguascalientes (por el fallecimiento de Ramón Godínez Flores en abril de 2007).
También Orizaba, de la cual el anterior obispo Hipólito Reyes Larios fue nombrado como arzobispo de Xalapa (abril de 2007) y San Juan de los Lagos en Jalisco, cuyo pastor fue trasladado a la diócesis de Zamora en mayo del año pasado.
Otros cuatro prelados esperan sustituto, el más importante de ellos el arzobispo de Puebla de los Angeles, Rosendo Huesca y Pacheco, quien cumplió 75 años el 1 de marzo de 2007 y 30 en su puesto.
Lo propio hizo Fernando Mario Chávez Ruvalcaba ñobispo de Zacatecas- el 30 de noviembre. El cambio más 'atrasado' es el de Alfonso Humberto Robles Cota, de la diócesis de Tepic, quien presentó la dimisión en octubre de 2006.
Algo similar ocurre con Juan de Dios Caballero Reyes, obispo auxiliar de Durango, quien cumplió los 75 el 23 de junio de 2006 y aún permanece en el cargo. Al no ser titular de la diócesis la norma canónica suele ser flexible.
Además de dar curso a designaciones pendientes, el embajador del Vaticano en México deberá en este 2008 recibir a siete obispos quienes cumplirán con la norma de renunciar por alcanzar el tope de edad.
De estos el más reconocido es el cardenal arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, quien el 28 de marzo próximo llegará a sus 15 lustros de vida. Con él entregarán su renuncia otros tres arzobispos.
Ricardo Guízar Díaz de Tlalnepantla (Estado de México), nacido el 26 de febrero de 1933; José Fernández Arteaga de Chihuahua, del 12 de septiembre de ese año y Pedro Arandadíaz Muñoz de Tulancingo (Hidalgo), nacido el 29 de junio de 1933.
Según el conteo global serán entonces cinco arzobispos los que deberán ser sustituidos a lo largo de 2008 y, quizá, 2009 de un total de 18 arquidiócesis que tiene la República Mexicana.
Cierran la lista de los prelados que presentarán su renuncia en los próximos 12 meses Salvador Martínez Pérez de Huejutla (26 de febrero), Florencio Olvera Ochoa de Cuernavaca (12 de octubre) y Abelardo Alvarado Alcántara, auxiliar de la Ciudad de México (8 de julio).
