La fallecida líder opositora Benazir Bhutto advierte sobre el riesgo de 'talibanización' y 'balcanización' que sufre Pakistán. (EFE)
La fallecida líder opositora Benazir Bhutto advierte sobre el riesgo de "talibanización" y "balcanización" que sufre Pakistán en el libro con sus últimos escritos que salió hoy a la venta.
La obra, de 328 páginas y titulada "Reconciliación. Islam, Democracia y Occidente", ha sido presentada hoy en sendos actos en Islamabad y Londres.
Aunque tan sólo ha sido publicada la versión en inglés, un responsable de la distribuidora paquistaní "Liberty Books" aseguró que en las próximas semanas saldrá a la venta la edición en urdu.
Las principales librerías de Islamabad han expuesto desde primera hora numerosos ejemplares del libro, publicado por la editorial "Simon and Schuster" con un precio que supera los 35 dólares.
Sobre el atentado perpetrado en la ciudad sureña de Karachi el pasado 18 de octubre, del que salió ilesa, Bhutto asegura que era "consciente del peligro".
Bhutto describe la emoción que sintió al observar el fervor de la gente acudiendo a recibirla tras nueve años en el exilio, aunque acusa al régimen de Pervez Musharraf de no aceptar las medidas de seguridad que solicitó.
La líder opositora murió finalmente el 27 de diciembre tras un mitin en Rawalpindi, cerca de Islamabad, cuando un suicida hizo estallar la carga explosiva que portaba y otro hombre disparó contra ella.
En sus textos, la líder del Partido Popular de Pakistán (PPP) hace una reflexión sobre el papel de la religión en los estados islámicos, critica la interpretación del Corán que hace una gran parte de ellos y se esmera en presentar el Islam como una "religión de paz y tolerancia".
Confiesa que es una obra escrita desde la posición de "una mujer musulmana moderna" y respalda esta afirmación mostrando su desacuerdo con la utilización del "burka".
"Reconciliación" es también una dura crítica al régimen de Musharraf, a quien la "hija del Este" (tal y como ella se define en su autobiografía) acusa de haber hecho más esfuerzos para impedir que la democracia avance que para combatir a los integristas.
Bhutto asegura que su retorno a Pakistán tenía como objetivo principal "devolver la democracia al país" y explica su temor por que los islamistas lleguen al poder y tomen así las riendas del programa nuclear paquistaní.
"Un país islámico tan grande sumido en el caos podría ser peligroso y catastrófico", asevera.
"Pakistán es hoy el país más peligroso del mundo. Se encuentra entre la talibanización y la balcanización. Ambos fenómenos están ganando mucha fuerza", remacha la líder del PPP.
También se hace palpable en las páginas del libro la preocupación de Bhutto sobre las rencillas entre las sectas musulmanas en Pakistán.
"Todos los musulmanes creíamos en un Islam. La unidad fue quebrantada bajo la dictadura del general Zia-ul-Haq. De repente, los musulmanes tenían que decir si eran suníes o chiitas", dice Bhutto, criticando así la figura del jefe del Ejército que ordenó la ejecución de su padre, el también ex primer ministro Zulfikar Ali Bhutto.