Karzai le preguntó a Mike Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, qué tipo de operaciones realizarán las nuevas fuerzas. (Archivo)
El presidente Hamid Karzai pidió hoy al máximo jefe del ejército estadounidense que consulte con el gobierno sobre su estrategia militar en Afganistán, mientras Estados Unidos se prepara para enviar 30 mil nuevos soldados a la zona.
Karzai le preguntó a Mike Mullen, jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, qué tipo de operaciones realizarán las nuevas fuerzas. Afirmó que el gobierno afgano debería estar informado por anticipado sobre los planes militares estadounidenses.
Mullen anunció durante el fin de semana que Estados Unidos enviará entre 20 mil y 30 mil soldados adicionales a Afganistán antes del verano, lo que demuestra la frágil situación del país siete años después de la invasión estadounidense.
La oficina de Karzai emitió un comunicado diciendo que Mullen dijo al presidente que las nuevas fuerzas serán enviadas a zonas peligrosas, como la frontera con Pakistán.
Mullen dijo a los periodistas que la OTAN y Estados Unidos tienen "suficientes soldados para lograr el éxito en combate", pero que carecen de suficientes para mantener el territorio donde se ha vencido.
El presidente afgano también pidió a Mullen que sus soldados vayan con cuidado en los poblados del país. Karzai lleva tiempo denunciando la muerte de civiles debido a operaciones militares norteamericanas.
Entretanto, una operación conjunta de las fuerzas de Estados Unidos y Afganistán en la frontera afgana con Pakistán dejó 20 insurgentes muertos en un mes, informó el lunes un gobernador regional.
Las tropas estadounidenses y afganas lanzaron la Operación Corazón de León para presionar a los milicianos en la provincia fronteriza de Kunar, así como en la región de Bajur en Pakistán.
Las fuerzas paquistaníes realizan su propia operación en Bajur en coordinación con Estados Unidos y las fuerzas afganas.
El Ministerio de Defensa informó que decenas de milicianos habían muerto o resultado heridos en el último mes. Un vocero de la dependencia dijo que no podía proporcionar cifras exactas.
Pero el gobernador de Kunar, Sayed Fazeullah Wahidi, informó que en los últimos 30 días unos 20 rebeldes habían muerto, incluyendo dos árabes y dos paquistaníes.
En otra zona de Afganistán, un coche-bomba con dos atacantes explotó el lunes cerca de las oficinas de un gobernador, causando la muerte de un civil afgano e hiriendo a siete personas más. Los dos atacantes murieron también, señaló Sayed Ismail Jahangir, vocero del gobernador de la provincia de Ghazni, en el centro del Afganistán.