Llevan a cabo el Programa de Educación Inicial no Escolarizada.
Para mejorar el desarrollo de los niños, desde 45 días de nacidos hasta los cuatro años de edad, más de 140 promotores recorren las comunidades rurales y colonias marginadas de Viesca, Matamoros y Torreón.
Y es que el Programa de Educación Inicial no Escolarizada tiene como propósito el mejoramiento de las prácticas de crianza de padres de familia con niños menores de cuatro años de edad a través de la higiene en el hogar, la nutrición y la promoción de la salud de los infantes, así como el desarrollo de las competencias contenidas en los ámbitos: cuidado y protección infantil; desarrollo personal y social; lenguaje, comunicación, exploración y conocimiento del medio.
Dichas competencias fortalecen los vínculos familiares y mejoran la capacidad de aprendizaje de los niños para que se alcance su incorporación más equitativa en la educación preescolar y se contribuya de esta manera a disminuir el rezago educativo que caracteriza a las comunidades en donde opera.
María de Lourdes Aguilera Valenzuela, coordinadora de Educación Inicial no Escolarizada, explicó que este sistema significa un proyecto de vida, pues trabajan con menores de cuatro años y sus madres a través de diferentes actividades.
“En cada una de las comunidades rurales contamos con grupos de padres de familia, y en cada uno hay un promotor educativo que se encarga de coordinar las actividades entre las madres y los niños, por supuesto también con los padres”.
Durante las sesiones, dijo, se reflexiona sobre la manera en que el padre de familia está educando a su hijo, “los promotores les encargan tarea y se reúnen con ellos, una o dos veces por semana en lugares que la misma comunidad define, puede ser una escuela, una plaza, una casa, en donde sea”.
Lo importante, agregó, es que los padres aprendan actividades para poder comunicarse de una manera sana con sus hijos, “recibimos a niños desde 45 días de nacidos hasta cuatro años, pues después de esta edad ya ingresan a preescolar”.
Promoción
Las competencias que desarrollan los promotores entre padres e hijos son:
Cuidado y protección infantil.
Desarrollo Personal y social.
Lenguaje y comunicación.
Exploración y conocimiento del medio.
FUENTE: Educación Inicial no Escolarizada
