La Brigada de Control de Vectores promueve el uso de abate en los aparatos de refrigeración, los cuales son criaderos potenciales de insectos, entre éstos el que transmite el dengue.
Exhortan a evitar que los aparatos de refrigeración se conviertan en criaderos de insectos.
Las autoridades sanitarias están promoviendo el uso de abate como parte del mantenimiento a los aparatos de refrigeración, pues se ha encontrado que éstos son uno de los principales criaderos de insectos, entre ellos el transmisor del virus del dengue.
El encargado de la Brigada de Control de Vectores de la Jurisdicción Sanitaria Número Dos, Julio César Segura Zarzosa, informó que la distribución de este producto se está realizando en forma gratuita a todas las personas que lo soliciten.
En la temporada actual, dijo, es cuando suele dársele mantenimiento a los equipos de aire lavado para contrarrestar las altas temperaturas, ante lo cual se está haciendo la recomendación de incluir un sobre de abate.
Señaló que esta es una de las principales medidas a promover como parte de la prevención de casos, aunque para ello se requiere que la ciudadanía se interese y se involucre en tales acciones, pues de lo contrario el resto de las campañas tendrá poco resultados.
Segura manifestó que el abate se tiene en pequeñas dosis en bolsas de plástico, las cuales deben ser perforadas y colocadas en las charolas de los equipos para que se mezcle con el agua.
Al igual que los equipos de aire, el abate debe ser colocado en todos los depósitos útiles de agua limpia, principalmente los tinacos que no estén cerrados herméticamente y a los cuales pueda introducirse el insecto para depositar los huevecillos.
La dosificación es de 20 gramos por cada 200 litros de agua, lo que garantiza que durante un periodo aproximado de tres meses, ese depósito estará libre de criaderos.
“Hay que recordar que el transmisor del dengue es un organismo oportunista, que se adapta muy fácilmente a las condiciones climáticas y de humedad que aquí tenemos”, según expresó.
El responsable de la Brigada manifestó que desde inicios de año, se practica una exploración entomológica en aquellas colonias donde se tuvo un mayor registro de casos de dengue clásico durante el año pasado.
Esto, con la finalidad de conocer el nivel de riesgo que existe en la actualidad y preparar las campañas de control y combate contra el insecto, para evitar que se vuelvan a presentar casos y se incremente el riesgo de dengue hemorrágico.
Julio César Segura dijo además que ya se organizan las primeras campañas de retiro de cacharros de las viviendas, considerando que ya se presentó la primera lluvia del año que aunque fue ligera, es una condición de alerta para emprender las acciones cuanto antes.
En cuanto a la aplicación de insecticida o nebulizaciones, refirió que ésta habrá de iniciar en los próximos días, una vez que el calor sea más intenso y por lo tanto se eleve la presencia de mosquitos en la región.
La ayuda es buena
La participación de la ciudadanía es vital para que las campañas arrojen resultados, indicó la encargada de la Jurisdicción Sanitaria Número Dos, Rosa Lilia López Moreno.
En lo que va de este año no se han tenido los primeros casos de dengue clásico, a diferencia de lo que ocurrió en 2007 en que ya en el mes de febrero se registró el primero.
Refirió que de hecho, la participación de la población es una de las principales medidas a promover durante este año, pues se ha visto que en la medida en que la gente mantenga sus casas libres de cacharros y los depósitos de agua debidamente cubiertos, existe un menor riesgo de que contraiga el virus del dengue.
Hace algunos días, el departamento de Epidemiología registró cuatro casos sospechosos, los cuales fueron descartados porque no se comprobó la presencia del virus en esos pacientes.