El presidente Felipe Calderón firmó el decreto promulgatorio de la reforma constitucional en materia de gasto público y fiscalización, a fin de que nada quede oculto al ciudadano ya que en este gobierno no puede haber espacio para la corrupción, el despilfarro o el mal manejo de recursos.
El decreto que fue firmado y promulgado destaca entre sus objetivos el establecimiento de un presupuesto basado en resultados, reforzamiento de la fiscalización de los recursos públicos, y la obligación de administrarlos bajo el principio de transparencia, rindiendo cuentas claras a los mexicanos.
Así instruyó al titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Agustín Carstens, a ahorrar un cinco por ciento anual en el gasto operativo del gobierno, y tomar las medidas necesarias para que a partir de la cuenta pública de este año se incorpore un enfoque de cumplimiento de resultados en la rendición de cuentas a los ciudadanos.
Además que en el proyecto del presupuesto para 2009 se mejore la calidad de los indicadores estratégicos, se evalúen los programas de manera rigurosa y sus resultados se reporten puntualmente al Congreso de la Unión.
En el salón "Adolfo López Mateos" de la residencia oficial de Los Pinos, también instruyó a los titulares de las dependencias y entidades federales a que formalicen medidas y compromisos concretos con indicadores de desempeño, a través de un programa de mediano plazo para modernizar y mejorar la prestación de servicios públicos.
Asimismo a incrementar la productividad en el desempeño de las funciones federales, reducir el gasto de operación administrativo y de apoyo y reducir las estructuras administrativas.
Además convocó a los gobiernos estatales y municipales a sumar esfuerzos y "coordinarlos para implementar de manera gradual pero eficaz el presupuesto basado en resultados en toda la República mexicana, en todos los estados y municipios del país".
Al afirmar que avanzando juntos los tres órdenes de gobierno con normas comunes y homologadas se podrá hacer un uso más eficiente de los recursos públicos en beneficio de la gente, el mandatario exhortó a un ejercicio oportuno e imparcial del gasto.
Ello "sin sesgos individuales, grupales o partidistas de manera que los programas públicos no sólo sean eficaces para el objetivo buscado, sino también sean vínculo de colaboración entre poderes y órdenes de gobierno en torno a objetivos comunes".
Acompañado por el presidente del Senado, Santiago Creel; y el secretario jurisdiccional de la Cámara de Diputados, Francisco Javier Santos Arreola, indicó que la reforma es un avance determinante en la transparencia y rendición de cuentas que debe caracterizar a todo gobierno democrático .
"Los poderes Ejecutivo y Legislativo, así como las soberanías estatales, han demostrado una vez más que es por la vía del diálogo y corresponsabilidad que podemos lograr acuerdos que se traduzcan en beneficios tangibles para todos los mexicanos", aseguró.
Agregó que es por la vía de las instituciones como puede hacerse más responsable, transparente y eficaz el ejercicio del gobierno, y dijo estar convencido de que es posible que México tenga estándares de transparencia y control de gasto público a la altura de los más avanzados.
Al acto también asistieron los presidentes de las comisiones de Hacienda y Crédito Público, Jorge Estefan Chidiac, y de la Función Pública de la Cámara de Diputados, Benjamín González Roaro.
