Siempre es preferible ayudar a la gente con transferencias e ingresos directos dirigidos que brindarle subsidios a todo el mundo, como en el caso de las gasolinas, considera, Bénédicte Larré, economista de la OCDE.
‘Se generan distorsiones a la economía y es muy costoso para las finanzas públicas’
La economista senior de estudios económicos de México de la OCDE, Bénédicte Larré, dijo que el subsidio a las gasolinas en el país se debe reducir porque sólo beneficia a la población de mayor nivel socioeconómico.
Aun cuando México tenga recursos disponibles para subsidiar a la población, no es una política adecuada en sí porque beneficia a gente de nivel socioeconómico medio y alto que no lo necesita, sostuvo.
En videoconferencia desde París, Francia, donde se realiza la reunión anual de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Larré indicó que este subsidio genera distorsiones a la economía y es muy costoso para las finanzas públicas.
En Estados Unidos y en Europa, agregó, las alzas en los precios de las gasolinas se han trasladado a los consumidores, generando beneficios de ahorro en combustible porque las personas paran sus automóviles y se utilizan alternativas de energía más eficientes.
Bénédicte Larré consideró conveniente aclarar que hay diferentes medidas, de sí son de corto plazo para solventar una situación como el subsidio directo a los pobres, o aquéllas de largo plazo que generan soluciones estructurales, como la reducción de aranceles.
Explicó que muchos países en la OCDE han optado por trasladarle los incrementos de precios de los precios del petróleo”.
Por su parte David Haugh, economista para México de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), dijo que esto genera los incentivos correctos a los consumidores para que economicen, para que ahorren en el uso de gasolina.
Destacó que el mantener subsidios a los energéticos hace a México más vulnerable al depender más de éstos y el resultado a largo plazo no es bueno, porque lo expone a los choques de precios del petróleo, como los que acabamos de ver, advirtió.
“Si se mantienen los precios del combustible artificialmente bajos en México, va a estar distorsionando las decisiones de las personas, lo que impulsará la compra de automóviles que consumen más petrolíferos, los negocios van a utilizar más petróleo; y por tanto, no va a contar con tantos ingresos por las exportaciones”, explicó.
Al respecto Bénédicte Larré agregó: “Tarde o temprano, nos gustaría ver en México la reducción de los subsidios a las gasolinas, a la larga, esto sería mejor para la economía”, agregó la economista.
La economista explicó que siempre es preferible ayudar a la gente con transferencias e ingresos directos dirigidos que brindarle subsidios a todo el mundo, como a los estadounidenses que estarían cruzando la frontera para comprar gasolina barata.
Finalmente consideró que el programa “oportunidades” es muy apropiado, ya que va a personas que los necesitan, donde hay medidas interesantes como suprimir o reducir las tarifas de importación sobre alimentos básicos como trigo, arroz, leche y fertilizantes, y algunos otros insumos para la agricultura.
Confirman ‘parálisis’ de EU
La economía de Estados Unidos corre un riesgo de ‘parálisis’ en 2008 y 2009 en los que sólo crecerá en torno al uno por ciento, coincidieron expertos y reportes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
El Producto Bruto Interno (PBI) de Estados Unidos ‘se paralizará prácticamente hasta finales de 2008, pese a la contribución positiva de la balanza comercial”, indicó la organización en su informe semestral de coyuntura publicado este miércoles aquí.
De acuerdo con el reporte, la actividad económica va a permanecer prácticamente estancada en Estados Unidos en donde el PIB crecerá este año un 1.2 por ciento, ocho décimas menos que en la estimación anterior de la OCDE.
La organización, cuyos indicadores tienen mucha fiabilidad y aceptación en medios económicos, indicó que la economía de la Unión Americana rondará el próximo año en 1.1 por ciento de crecimiento.
En su anterior pronóstico, la OCDE, de la que forman parte las 30 principales economías mundiales, había pronosticado para 2009 que la economía de Estados Unidos crecería un 2.2 por ciento.
La economía de Estados Unidos “afronta vientos fuertes en su contra, que frenan considerablemente la actividad” insistió la OCDE en sus perspectivas semestrales publicadas este miércoles sobre la primera economía del mundo que el año pasado creció 2.2 por ciento.
Por otro lado, los economistas de la organización destacaron también la degradación del mercado de trabajo en los últimos cinco meses y advirtieron de un aumento del desempleo en Estados Unidos a un 5.4 por ciento a finales de este año y de un 6.1 por ciento en 2009.
Respecto al mercado inmobiliario, en el origen de la crisis financiera actual, los expertos señalaron que Estados Unidos será una de las cinco grandes economías mundiales en las que caerá el precio de la vivienda.
En concreto, la OCDE pronosticó una caída de un diez por ciento de los precios de la vivienda hasta finales de 2009.
En sus recomendaciones, la organización instó a la Reserva Federal de Estados Unidos, la Fed, a no elevar su tasa de interés, fijada actualmente en el dos por ciento “hasta que la recuperación se haya asentado”.