Es común que los conductores hagan alto donde quieren frente a la luz roja del semáforo, pero sin respetar un límite, el cual en muchos casos no está delimitado. En la imagen se aprecia un ejemplo de lo anterior en el crucero de Reforma y Abastos.
Algunos artículos de la nueva norma no se pueden aplicar por la falta de indicadores para peatones y vehículos.
Aun cuando la mayor parte del Reglamento de Vialidad Municipal entró en vigor el pasado primero de febrero, luego de un mes de “gracia”, los cruces peatonales, carriles de circulación, indicadores de velocidad y otros señalamientos de seguridad siguen sin recibir mantenimiento.
Para Sergio García López, presidente del Consejo de Vialidad Municipal, “las autoridades municipales podían haber hecho las dos cosas a la par: preparar la infraestructura vial necesaria y elaborar el nuevo Reglamento de Vialidad, pero fue a la inversa”.
Así, aunque el Artículo 36 Sección Primera del Capítulo referente a Infracciones indica una multa de 7 salarios mínimos, es decir, 346.50 pesos, para el automovilista que invada la zona de seguridad del peatón, ésta no se puede aplicar porque tal espacio de protección no existe.
Las rayas blancas o amarillas de las zonas peatonales están despintadas en la mayor parte de los cruceros, aún en las vialidades principales como los bulevares Diagonal Reforma e Independencia, y en rúas como el bulevar Constitución los guiones de los carriles de circulación tampoco existen.
Por lo tanto, es común que los conductores hagan alto donde quieren frente a la luz roja del semáforo, pero sin respetar un límite. La fila de vehículos se queda prácticamente al pie de los semáforos y los peatones pasan como pueden.
A este respecto, el director de Ingeniería de Tránsito, Francisco Torres Suárez, dijo que se han hecho ya algunos trabajos en vialidades como la calzada Colón y en el par vial de las calles 21 y 22, pero todavía faltan más acciones por hacer.
Según él, este año se invertirá un millón y medio de pesos para dotar a la ciudad de la infraestructura vial que requiere para estar al nivel de un reglamento de vanguardia como es el de vialidad.
