Padres de familia hacen las últimas compras de útiles escolares antes de la entrada de los niños a clases durante la próxima semana.
Ante el cercano regreso a clases de las primarias y secundarias, los padres de familia se enfrentan al reto de hacer rendir el presupuesto del hogar y comprar los útiles escolares que los niños necesitarán en el ciclo que inicia.
En un recorrido por papelerías y tiendas de autoservicio se observó a diversas mamás que comparaban precios de cuadernos, lápices, borradores y demás artículos, a fin de comprar el más económico. Esther González, madre de dos estudiantes de primaria, explica que ha gastado más de 800 pesos en los útiles, uniformes, zapatos, y las inscripciones de sus niños, pero considera que “me ha ido bien, el año pasado fueron como 500 pesos tan sólo de uno y ahora que todo está más caro me fijé más en las ofertas y fui comprando así las cosas”.
Los 800 pesos que ha invertido Esther en útiles escolares, uniformes e inscripciones representan el 11 por ciento del salario de su esposo, quien es empleado en un Banco y gana alrededor de siete mil pesos mensuales, mientras que ella se dedica al hogar.
Por su parte, Diana Ramos es madre de tres menores, dos en primaria y una niña en secundaria, por lo que estima que ha gastado alrededor de mil 500 pesos en este regreso a clases. Ella vende zapatos por catálogo y obtiene cerca de dos mil pesos al mes, su esposo es empleado y gana cerca de 13 mil pesos, por lo que el gasto escolar representa el diez por ciento de su presupuesto mensual total.
“Pero también hay que pagar las mensualidades de la casa, del carro, el agua, la luz, el teléfono, la computadora, la verdad es que apenas alcanza, pero en las escuelas cada vez piden más cosas”, dice la señora.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) advierte a los padres de familia que las escuelas no pueden obligarles a comprar uniformes y útiles nuevos. Tampoco se puede obligar a los papás a que compren las cosas en la escuela, pues tienen el derecho de elegir el establecimiento que más les convenga para hacer sus compras.
Las escuelas no pueden exigir libros, materiales ni uniformes nuevos, lo único que pueden pedir es que se encuentren en buen estado y que correspondan a las ediciones actualizadas. Si al hablar con el maestro o el director, éste insiste en esta situación y se amenaza con afectar las calificaciones de los hijos o no aceptarlo en la escuela, el padre de familia debe llamar cuanto antes al teléfono del consumidor, al 01-800-468-8722 sin costo desde cualquier parte del país y presentar una queja para que Profeco verifique y sancione a la institución educativa.
Para ahorrar
Enseguida se presentan algunas recomendaciones de la Profeco para ahorrar en este regreso a clases en cuanto a útiles escolares.
* Reutilizar lo del año pasado: cuadernos, borradores, colores, tijeras y juegos de geometría pueden servir en el siguiente ciclo escolar, a menos que estén rotos o descompuestos.
* No hay que irse sólo con las ofertas, sino hay que comparar entre dos y tres alternativas.
* Se debe evitar, en la medida de lo posible, adquirir los artículos en el comercio informal, ya que éstos son de mala calidad.
*Para conservar los útiles por más tiempo se deben marcar con el nombre de los niños y su clase o salón, así como tener un lugar propio para guardarlos en casa.
* Hacer un estuche para guardarlos, puede ser una caja reforzada y decorada al gusto del niño, y que quepa en su mochila.
* Para que duren más tiempo, los útiles no deben exponerse al sol, calor o agua, ni dejarlos a la intemperie.
FUENTE: Profeco
