Una serie de acuerdos a corto y mediano plazo fue el resultado de la negociación que las autoridades municipales ayer tuvieron con los habitantes de la colonia Mariano Matamoros, quienes el miércoles por la noche, protestaron por la presencia de una laguna de aguas negras situada en la parte norte de la plaza principal.
El más importante y que se dio de inmediato por la mañana, fue la presencia de dos motobombas que llegaron al punto del conflicto para desaguar, dado que ya hasta lama verde se apreciaba en la superficie de la enorme charca. Aunque lo más grave, es que el drenaje empezaba a brotar dentro de los domicilios.
El secretario del Ayuntamiento, Enrique Sánchez Tovar, ayer relató que el miércoles entre las 20:00 y 22:00 horas, alrededor de 150 personas de la colonia Mariano Matamoros a manera de censura, bloquearon el paso vehicular por el bulevar José Santos Valdés a donde él acudió junto con el titular del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Simapa), Servando Chavarría Arreola, para concertar un pacto con los manifestantes.
No sin antes resaltar que las autoridades de tránsito y vialidad, lograron desviar el tráfico a otras vías con resultados positivos, pues se evitaron embotellamientos posibles, señaló que las personas ese día, accedieron a retirarse cuando su petición de tener una plática con el alcalde Homero Hernández Muñoz a primera hora de la mañana de ayer, fue aceptada.
Así fue. Aunque a esa hora, los trabajos de desagüe que se realizaron durante la madrugada del jueves recayeron. La razón: las lluvias en la alborada nuevamente permitieron la saturación de las líneas de drenaje.
“Estaba totalmente seco, pero el chubasco empeoró todo y el alcalde como a las 10 de la mañana en presencia de la gente, solicitó una pipa con capacidad de 15 mil litros para sacar esa agua y arrojarla a un sector muy lejano para evitar un problema de contaminación y enfermedades posibles”, expuso.
Entre los acuerdos que se llevarán a mediano plazo y que conformaron a los habitantes afectados, está la promesa de que en 45 días se arreglará el drenaje colapsado. Equivale a unas 12 cuadras que impiden la conducción del drenaje hacia el colector principal de la ciudad, por eso, reposan las aguas negras en la esquina norte de la placita de la Mariano Matamoros.
“Mientras esto sucede, está el compromiso de que la pipa estará sacando todos los días del drenaje en ese punto, para evitar que se forme la laguna y se filtre a las viviendas”, puntualizó.
