Reaccionan empresas ante acusaciones de Carstens
Las declaraciones de Agustín Carstens, secretario de Hacienda en donde acusaba a empresarios de movimientos que generaron la debacle del peso, generó una serie de reacciones en donde tanto en el sector empresarial como dentro del Congreso.
Al mismo tiempo que Guillermo Ortiz, gobernador del Banco de México arremetió contra Comercial Mexicana y señala que no debió meterse en movimientos especulativos contra el peso, a través de operaciones con productos derivados.
“Comercial Mexicana es una empresa que vende tomates, que vende ropa, que vende productos perecederos, de consumo duradero, es una empresa fuerte, bien manejada con poca deuda. Y esa empresa, desde hace ya tiempo, empezó a meterse en el negocio de vender volatilidad... es una empresa que no tenía que estar en ese tipo de actividades”.
Al respecto, Guillermo Babatz, presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), dijo que antes de finalizar este año concluirá las investigaciones en torno a las empresas que especularon en contra del peso y se habrían beneficiado.
Quien negó haber infiltrad información sobre posibles empresas con movimientos especulativos. Babatz señaló que “depende de lo que vayamos encontrando, cuando abrimos una investigación conforme se revisan los libros de la empresa y las notas de los comités surgen distintas líneas que se tienen que seguir, pero es una cuestión que debería de estar o acabar nuestra investigación más no así necesariamente el proceso de sanción este mismo año”.
Al preguntarle en torno a las sanciones a las que se harían acreedores, el funcionario dijo que “dependiendo de la irregularidad que se encuentre, en términos las faltas que en principio pudieron haberse cometido es la falta de información al gran público inversionista acerca de ciertas operaciones que tendrían que haber revelado en caso de que no se hubieran revelado y también vamos a revisar la buena aplicación de los principios contables para los estados financieros que se publican en la bolsa de valores”.
Por su parte, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) criticó el que se culpe de manera generalizada a este sector por posibles prácticas especulativas, en medio del nerviosismo cambiario de los últimos días.
“El sector privado rechaza la aplicación generalizada de calificativos y acusaciones contra la comunidad empresarial del país”, sostuvo el organismo a través de un comunicado.
Indicó que corresponderá a las autoridades competentes analizar e investigar si alguna empresa ha incurrido en faltas a la normatividad vigente, dar seguimiento caso por caso y, de así requerirse, sancionar en los términos de la ley.
Sin embargo, el CCE aclaró que no debe olvidarse que llevamos varios años bajo un régimen de libre oferta y demanda de divisas, por lo que es natural que las empresas recurran a la compra legítima de divisas en el mercado para atender sus compromisos financieros.
“Esto es perfectamente lícito cuando se realiza a través de los mecanismos e instituciones diseñados para tal efecto”, acotó, por lo que “a las empresas les corresponde registrar de manera fidedigna estas operaciones, y en dado caso, revelar la información con transparencia y nitidez a autoridades y accionistas”.
Niega GISSA movimiento especulativo
Grupo Industrial Saltillo S.A. (GISSA) negó haber acaparado divisas en el mercado de derivados y con ello haber contribuido a la caída del peso. Exigió también que quienes lo acusan salgan del anonimato.
Según autoridades financieras las empresas nacionales Comercial Mexicana, Alfa, Grupo Industrial Saltillo y Cemex son algunas de las que contribuyeron a la depreciación de la moneda.
“No tenemos nada que esconder, en ningún momento especulamos”, declaró tajante el secretario de Relaciones Públicas de dicho consorcio, Jorge Verastegüi Saucedo, al contradecir un nota publicada. Al no tener, apuntó, una comunicación oficial de la CNBV, respecto a las acusaciones que no revelan una comisión determinada no vamos a caer en controversias ni en rumores.
Evalúa Comercial Mexicana vender activos
José Calvillo, encargado de solucionar el millonario adeudo de Controladora Comercial Mexicana (CCM), dijo que hasta ahora las alternativas de la empresa para finiquitar las deudas que se dispararon con la volatilidad cambiaria es a través de la venta de activos, así como el tipo de venta.
A decir del entrevistado, CCM cuenta con terrenos sin construir con un valor superior de los 3 millones de dólares, así como una utilidad de operación de 400 millones de dólares al año, ello sin contar el valor de las unidades comerciales.
¿Venderán las tiendas? Se le inquirió. “No estamos desechando ninguna alternativa, se van a evaluar todas, se van a hacer corridas con todas”, y vamos a selecciones la que mejor convenga a CCM, comentó.
CCM no buscará establecer una alianza con algún otro socio porque considera que el precio de su acción está muy deteriorado y no refleja el valor real de la cadena de tiendas de autoservicios, en opinión del directivo.
El nuevo problema para CCM será quién podría comprar sus activos en medio de la incertidumbre financiera y un consumo debilitado, comenta Bernardo González, analista de Fitch Ratings México.
De hecho, Moody’s Investors Service retiró hoy todas las calificaciones de CCM porque la compañía, el 9 de octubre de 2008, anunció que había solicitado protección de sus acreedores y suspensión de pagos (Ley de Concurso Mercantil). Para el González, lo más importante en estos momentos es la negociación que Comerci establezca con sus acreedores, que son 12 bancos que operan en México.
González dijo que el entorno es retador porque el consumo de productos de consumo masivo está debilitado y los consumidores optan en estos días por reducir su gasto y cuidar su presupuesto, y ello podría repercutir en la utilidad de operación.
Reduce S&P calificación de Cemex
Standard & Poor’s Ratings Services (S&P) bajó las calificaciones de riesgo crediticio de largo plazo y de deuda senior no garantizada de Cemex y de sus subsidiarias operativas en México, España y Estados Unidos.
Las notas se redujeron de ‘BBB-’ de ‘BBB’ debido a la expectativa de S&P de que el desempeño financiero de Cemex para el resto de 2008 y en 2009 será menor a sus estimaciones previas, dado el debilitamiento de las perspectivas de crecimiento económico en sus principales mercados y a nivel global.
La perspectiva se mantiene en negativa y no deja el grado de inversión. “La baja de las calificaciones refleja nuestra expectativa de que el desempeño financiero de Cemex para el resto de 2008 y en 2009 será menor a nuestras estimaciones previas, dado el debilitamiento de las perspectivas de crecimiento económico en sus principales mercados y a nivel global”, dijo Standard and Poor`s en un comunicado a la Bolsa Mexicana de Valores.
La calificadora dijo que Cemex enfrenta importantes vencimientos de deuda por 5,700 millones de dólares en 2009 (específicamente, vencen 3,700 millones de dólares relacionados con la adquisición de Rinker en diciembre), lo que presenta un desafío importante para la compañía frente a las condiciones que prevalecen en el mercado.