La menstruación eleva la sensibilidad de las mujeres, pero sobre todo en aquellas que padecen de cólico menstrual.
Algunas mujeres viven cada mes verdaderas pesadillas, molestias que van de leves a severas y que obligan a sus víctimas a resguardarse en casa.
En los días cercanos a la menstruación, incontables mujeres no piensan en otra cosa que en los molestos cólicos, y en algunos casos no pasan de simples incomodidades momentáneas, pero en muchos otros son más que un dolor de cabeza o de vientre para ser precisos.
Especialistas en salud femenina nos cuentan que estas tormentas de cada 28 días tienen que ver con hormonas, las cuales influyen y condicionan el ciclo menstrual. Cuando se alteran, trastocan la regla normal y dan lugar a trastornos físicos y emocionales.
Estas alteraciones femeninas, dicen, son la principal causa de que el 50% de las mexicanas en edad reproductiva presenten un dolor al que llaman comúnmente retortijón, pero que en realidad es más intenso, se trata de un cólico.
El efecto del cambio hormonal puede desatar ataques de calambres en las piernas, provocar dolor pélvico o abdominal intenso, o bien molestias fuertes en la parte baja de la espalda (a la altura de los riñones).
Las molestias de esos días incluyen principalmente: dolores de cabeza, náuseas, mareos, vómitos, desmayos, diarrea o estreñimiento, fatiga, así como ansiedad, irritabilidad o depresión.
Ciclo de dolor
El ciclo menstrual, explican, es un fenómeno natural que toca el estado físico y anímico de las mujeres, lo hace en forma aguda cuando les provoca cólicos, que se deben a una irregularidad de la función de la menstruación, caracterizada por periodos dolorosos que pueden aparecer algunas horas antes o durante el periodo.
La mejor forma de abatir esas molestias es visitar al ginecólogo o echar mano de un medicamento de libre venta, pero reconocida eficiencia. Un fármaco que disminuya el dolor y la inflamación desde el origen.
Esto, porque según expertos médicos, en el periodo de la regla, el aumento de progesterona previo a la menstruación genera retención de líquidos e hinchazón, así como dolor de senos y trastorno del aparato digestivo, lo que provoca que la ropa quede más ajustada, apriete y moleste.
Algunas mujeres sufren evacuaciones diarréicas sin motivo aparente en relación con los alimentos, así como náuseas constantes debido a la progesterona, pero estas molestias regularmente desaparecen al segundo día de la menstruación.
Detonadores asociados
El estado de ánimo también es sacudido por la menstruación, debido a la disminución de estrógenos y al aumento de progesterona. Este cambio brusco eleva la sensibilidad de las mujeres, pero sobre todo en aquellas que padecen de cólico menstrual.
El peso es otro factor que afecta al equilibrio hormonal. Si una mujer tiene bajo peso sus hormonas no funcionarán correctamente y la menstruación puede desaparecer.
El sobrepeso igualmente puede desequilibrar las hormonas. El estrés también afecta, por ejemplo: en ocasiones muchas mujeres sienten que estar preocupadas por algo afecta a su menstruación, y en algunos casos ésta puede detenerse por la preocupación de estar embarazada.
Durante el periodo menstrual, es difícil mantener una rutina de ejercicios debido a la inflamación y el dolor. Para disfrutar el ser mujer siempre, sin las molestias que esto provoca, algunos médicos recomiendan tomar Buscapina Fem, fármaco que combina un antiespasmódico que alivia el espasmo causante del cólico y un analgésico que ataca el dolor y la inflamación desde el origen.
