Realizan acto por la paz en Durango
Miles de duranguenses se vuelcan a las calles para exigir que la tranquilidad regrese a la entidad.
La ciudadanía se volcó a las calles. Se vistió de blanco, llevó a sus familias e invadió las principales calles de la ciudad con un solo objetivo: pedir ayuda, ya no a las autoridades, sino a un ser supremo para que la paz regrese a Durango.
“Hay que orar, ya no podemos salir a las calles por el temor”, expresó la señora Guadalupe Márquez, quien fue una de las más de cuatro mil personas que asistieron a la Procesión de la Paz para pedir, suplicar, que la violencia llegue a su fin.
El arzobispo de Durango, Héctor González Martínez, exhortó, en una misa masiva en la Plaza de Armas, a las autoridades a investigar e informar a la ciudadanía lo que está pasando y lanzó unas palabras de consuelo a aquellos que ahora “tienen miedo”.
La ceremonia empezó a las 18:00 horas en el atrio de Catedral en donde leyó dos lecturas y un evangelio para dar esperanza a quienes han perdido a un ser querido en la guerra contra el narcotráfico.
Las súplicas
En su mensaje hizo un llamado a aquellos que pertenecen a la delincuencia organizada, para que dejen de contaminar a la sociedad con drogas y de disputarse territorios. Además, señaló que Jesús Malverde no es un santo y que no tiene ninguna efectividad.
“Exhortamos a los implicados en la corrupción y en el tráfico de enervantes: es inmoral y pecaminoso cultivar, distribuir o comercializar enervantes para esclavizar hermanos... por Jesucristo Misericordioso conviértanse, cambien y respeten a Dios y al hombre”, convocó.
El mensaje fue también para las autoridades, para que investiguen los hechos y se conozcan los resultados; “la sociedad necesita información básica y confiable para que no todos o cualquiera divulguen sus versiones envolviéndolos en la incultura del rumor. A veces cuesta distinguir quién nos habla con la verdad”.
González Martínez dijo que a su llegada conocía que la entidad estaba influenciada por el narcotráfico, y con el paso del tiempo se fue incrementando más hasta desatar la ola de violencia que ha prevalecido en los últimos meses.