Con un nudo en la garganta y aún con secuelas de las lesiones sufridas en el atentado, en el que perdieron la vida tres de sus acompañantes, el alcalde de Navolato, Jesús Fernando García Hernández, dijo que su vida cambió, por lo que ahora tiene que utilizar escoltas.
Al evocar la fracción de minutos en que su vida pendió de un hilo, asentó: "El mal sabor de boca no sólo se queda ahí, se hace un nudo en el estómago y duelo hasta el alma sentir en carne propia, del sufrimiento de otras familias víctimas de la violencia".
Su presencia, al frente de los contingentes participantes del desfile cívico deportivo de su comuna, luego de haberse ausentado del cargo por 15 días, generó aplausos de los presentes.
Al recordar la noche del pasado 5 de octubre, cuando en compañía del político César Villaescusa Urquiza, quien conducía la camioneta en que viajaba y de los regidores César Villaescusa Gastelum y Andrés Carrillo Ramírez fueron atacados por un comando armado, la voz se le corta y su cuerpo se tensa.
El presidente municipal de Navolato todavía no entiende el motivo del atentado que sufrió junto con sus acompañantes, del cual en forma milagrosa salvó la vida, por considerar que nunca ha sido víctima de amenazas de ningún tipo.
Los escasos recuerdos del hecho que brotan de su voz sólo se refirieron a que en fracción de segundos, a su lado, el político y agricultor, César Villazcusa, quien conducía la camioneta, se dobló bajo una lluvia de balas. Él por instinto se tiró prácticamente en el piso de la unidad, lo que le salvó la vida.
Según el reporte médico que se emitió, el primer edil sólo presentó tres lesiones por esquirlas, en tórax, muslo y en un ojo, por lo que permaneció cinco días hospitalizado.
"Sufrí en carne propia, los efectos de la violencia que envuelve a varios municipios de Sinaloa y del resto del `país, por lo que ahora mi preocupación es mayor, tengo que buscar cómo garantizar la seguridad de la población y la mía propia".
Precisó que nunca había dispuesto de escolta, pero ahora tiene que evaluar las condiciones en las que seguirá al frente de la alcaldía.
A diez días de haber sido dado de alta del hospital, luego de sobrevivir en forma milagrosa de un ataque de un grupo de sicarios, sobre la carretera Altata- Navolato, a la altura del ejido Valdés Montoya, el alcalde señaló que su planteamiento, es que se asuman nuevas estrategias de lucha contra la delincuencia organizada.
Indicó que va a inculcar entre los habitantes de su municipio y los funcionarios el apoyo mutuo, a fin de imprimir un mejor ánimo, tendiente a fortalecer las acciones que se despliegan para inhibir los hechos delictivos y retornar la tranquilidad en su jurisdicción.
Jesús Fernando García, destacó que en forma oficial, por parte de las autoridades federales y estatales no ha tenido una comunicación que le orienten sobre cuáles son las líneas de investigación que se desarrollan en torno al atentado que sufrió.
Sobre el posible móvil, dijo desconocer de donde proviene el ataque, puesto que en el ambiente hay muchos comentarios.
Voy a retomar la agenda gubernamental, aun cuando está pendiente otra intervención quirúrgica para aliviar la lesión en la clavícula.
