El alcalde José Ángel Pérez (der.) al momento de que se rechazó la cuenta pública de su Administración. A la izquierda, el secretario del Ayuntamiento, Rodolfo Walss. (Sergio Reyes)
Tres ediles del PAN se unen al PRI para votar en contra.
Por primera vez en la historia reciente, las cuentas financieras de una Administración municipal fueron rechazadas por el Cabildo.
Ayer, dos regidores y el síndico del PAN se unieron a siete ediles del PRI para votar contra la cuenta del primer cuatrimestre de 2008 presentada por la Tesorería Municipal, dándole un duro golpe al alcalde José Ángel Perez Hernández, en el inicio de un proceso electoral.
Las regidoras panistas Montserrat Martínez y Karina García y el síndico, Eduardo Albores, no fundamentaron su rechazo a la cuenta pública, pero se unieron al voto de los priistas que cuestionaron el manejo de programas sociales, como reparto de despensas, así como la compra con dinero público de 200 boletos para el partido del Santos el domingo pasado.
Los ediles también mencionaron quejas de funcionarios que han señalado que a directores generales y de área se les descuenta hasta cinco por ciento de su sueldo para aportar dinero al PAN municipal y exigieron una investigación de la Contraloría Municipal.
Con tres votos del PAN unidos a siete del PRI, el alcalde no pudo juntar la mayoría, pues sólo contó con seis votos de su partido, más el suyo, al registrarse la abstención de la segunda regidora, Laura Muñoz y la ausencia del séptimo regidor, Jesús Martínez.
El tesorero municipal, Enrique Sada, dijo que tiene un mes para enviar la cuenta al Congreso del Estado, pero dado que el rechazo no tiene precedentes, analizan si la cuenta se regresa a la Comisión de Hacienda del Cabildo o se envía al Congreso aun sin aprobar.
Albores aclaró que con su voto en contra no avalaba los señalamientos de los priistas. “Tenemos nuestra propia postura”, dijo, pero añadió que “no estoy de acuerdo con la manera como José Ángel Pérez está ejerciendo el gasto”.
Albores criticó al alcalde pues dijo que no toma en cuenta a los regidores de su propio partido, y que el voto en contra es una consecuencia. “Son ya dos años y medio de esa actitud, de que nos ignora y de acciones que se cometen en las que no estamos de acuerdo”, dijo.
Martínez y García rechazaron hacer declaraciones, así como la segunda regidora (panista) Laura Muñoz, que se abstuvo de votar.
El alcalde llegó a la sesión de cabildo de ayer en la tarde hasta que se realizaba la votación de la cuenta. En un momento se puso de pie y se acercó al lugar de Albores, a quien le reclamó su postura y le advirtió que es una indisciplina.
El alcalde rechazó hacer declaraciones tras la sesión.
Sada reconoció que el voto de los panistas fue “algo inesperado y sobre todo porque no justificaron de ninguna forma su voto en contra”.
Esta fue la primera vez que la cuenta pública, que representa el resumen del ejercicio del gasto público, es sometida al Cabildo de manera cuatrimestral, pues hasta el año pasado se hacía cada tres meses.
