El presidente electo de Paraguay, Fernando Lugo (izq.), y el nuncio apostólico, Orlando Antonini, se reunieron ayer en Asunción. (EFE)
Señalan que el Vaticano atendió la solicitud del próximo presidente de Paraguay ‘luego de mucha reflexión’.
Fernando Lugo se convirtió ayer en el primer obispo católico en recibir la dispensa del Papa Benedicto XVI para convertirse al estado laical, a dos semanas de asumir la Presidencia de su país, anunció ayer la Iglesia Católica local.
En un caso “sin precedente” en la Iglesia Católica, pues los obispos no podían gozar de la reducción al estado laical como los sacerdotes, el Vaticano “atendió la solicitud de Lugo” luego de mucha reflexión, señaló el nuncio apostólico Orlando Antonini.
Antonini entregó ayer al ex prelado una copia de la decisión de Benedicto XVI, durante una entrevista que ambos sostuvieron en la sede de la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), que gobernará a partir del próximo 15 de agosto.
El representante de El Vaticano en Paraguay recordó que Lugo, obispo emérito de la diócesis de San Pedro, solicitó el 18 de diciembre de 2006 “la pérdida del estado clerical para presentarse a las elecciones del 20 de abril”.
“La Santa Sede, después de haber intentado disuadir a monseñor Lugo para que no se presentase a la Presidencia de la República de Paraguay, lo ha suspendido en el ejercicio sacerdotal, pero tras un minucioso estudio del caso, accedió a su pedido”, apuntó Antonini.
Explicó que al mandatario electo paraguayo se le concedió una dispensa definitiva o perpetua, lo cual implica “la pérdida del estado clerical con todas las obligaciones como sacerdote y obispo del Verbo Divino”.
Esto significa, agregó Antonini, “la consiguiente pérdida de los derechos inherentes al mismo, dispensándolo de los votos religiosos hechos en la sociedad del Verbo Divino, de la obligación del celibato y de las demás obligaciones que le estado clerical comporta”.
Por este motivo, Lugo “vuelve al estado laical y pierde el estado clerical, en caso de que éste vuelva a solicitar su incorporación a la Iglesia como obispo, el caso debe volver a ser analizado por la Santa Sede”, añadió Antonini.
Destacó que después de mucha reflexión, el Vaticano escuchó “el clamor de todo el pueblo paraguayo”, y tomó la decisión.
La resolución, fechada el 30 de junio pasado, lleva las firmas del cardenal Giovanni Battista, prefecto de la Congregación para los Obispos, y de Francesco Monterisi, secretario de dicho alto órgano de El Vaticano.
“La actuación eclesial en el caso de Fernando Lugo se ha debido exclusivamente a razones canónicas y pastorales y la Iglesia, sin abdicar a su rol profético, continuará en sus relaciones con las autoridades civiles”, apuntó el nuncio apostólico.
Recordó la Constitución “Gaudium et Spes” del Concilio Vaticano II, según la cual “la comunidad política y la Iglesia son entre sí independientes y autónomas en su propio campo”.
Agradece Fernando Lugo a Benedicto XVI
El presidente electo de Paraguay, Fernando Lugo, manifestó ayer su alegría por la dispensa que le concedió el Papa Benedicto XVI para retirarle el estado clerical y reconoció que “era una noticia esperada por mucho tiempo”.
El ex obispo emérito dijo que “no ha sido fácil para la Santa Sede tomar esa determinación, debido a que no hay antecedentes similares”, por lo cual expresó públicamente su agradecimiento al Pontífice.
“Yo quisiera agradecer sinceramente a su santidad Benedicto XVI por una decisión que no ha sido fácil (...) Es la noticia esperada por mucho tiempo”, abundó Lugo, quien asumirá el próximo 15 de agosto el poder en Paraguay.
El mandatario electo paraguayo aclaró, sin embargo, que una vez que cumpla con su periodo constitucional como gobernante, en el año 2013, estudiará la posibilidad de volver a su estado religioso como sacerdote y obispo emérito.