La actriz les presentó su espectáculo “Con la P en la frente”, con el que las divirtió a lo largo de 90 minutos. (El Universal)
Tiaré Scanda hace olvidar sus penas a internas del reclusorio.
De pronto, una actriz aparece en una cárcel de mujeres. Mientras ella presenta con éxito su show, decenas de reclusas le aplauden y ríen; se olvidan, aunque sea por un momento, de sus respectivas tragedias y sentencias, desde uno hasta 500 años en prisión.
Aunque parezca un sueño, o quizás una pesadilla, se trata de la realidad. Tiaré Scanda, la actriz de Alma de Hierro, se presentó por primera vez en solitario en una cárcel, el Centro Femenil de Readaptación Social Santa Martha Acatitla, para llevar su espectáculo “Con la P en la frente”.
Al salir del lugar confesó varias cosas: una, que en un principio tuvo miedo al llegar al lugar ante la terrible posibilidad de que fuera agredida; dos, que aprendió mucho de las internas y en general de dicha experiencia y, tres, que eso no tiene nada que ver con la vida frívola de algunos artistas.
“He tenido ese privilegio y lo digo así porque finalmente son lugares donde uno puede aprender muchísimo del ser humano y revalorar muchas cosas... Me conmueve saber que nadie es mejor que nadie, que no soy mejor que ninguna de las internas que están aquí. Estas son las cosas que como artista te van formando muchísimo, mucho más que las alfombras rojas y todas las frivolidades de la carrera”, manifestó la también cantante que ofreció un show de casi 90 minutos.
Sobra decir lo agradecidas que se veían las internas por este espectáculo. Mientras unas preparaban hamburguesas y papas fritas con chile, además de chicharrones con cuerito -sí, está autorizada la vendimia-, otras carcajeaban ante lo que escuchaban.
De hecho, esperaron a Tiaré tras el show para pedirle su autógrafo, aunque muchas de ellas jamás la hubieran visto en su vida. Algunas se compartieron pedacitos de papel para obtener la rúbrica, otras utilizaron su brazo como papel.
“Me dio mucha ternura una interna que estaba con su bebé. Además su bebecita se llama Dulce Esperanza; casi me partió el corazón”, externó Tiaré, quien también actualmente presenta el show Business Class.
La ponen neviosa
“Tenía un poquito de miedo de que fueran tantas porque el espectáculo está diseñado para un público un poco menos vasto (estuvieron presentes alrededor de 700 reclusas). Me daba miedo que a lo mejor se dispersaran, que no pusieran mucha atención y que me agredieran”, dijo.
Tiaré adelantó que próximamente saldrá a la venta el disco de “Con la P en la frente”, con el cual debutó como productora musical.
