Inician protestas Oficiales de la Policía japonesa vigilan a activistas anti G-8 que protestan contra la cumbre del Grupo de los 8 que se celebrará en Toyako, Sapporo, Japón, el próximo lunes. (EFE)
Las naciones del Grupo de los Ocho (G-8), que efectúan su reunión cumbre anual en Japón a partir del lunes, siempre han constituido un club reservado a las economías más grandes y saludables del mundo. Ahora, un coro creciente reclama que el club abra sus puertas a otros.
China, que no está en el G-8, ha eclipsado a más de la mitad de los miembros del grupo en magnitud económica, y el Producto Interno Bruto de Brasil es mayor que el de Rusia.
“¿Cuándo pasarán del G-8 al G-13”, se preguntó Lael Brainard, del Brookings Institution, un grupo de estudio en Washington. “Ninguno de estos problemas puede solucionarse sin la participación de países como China, India, México, Brasil y Sudáfrica”.
Por cierto, el dominio del G-8 sobre la economía mundial no es lo que solía ser.
Estados Unidos, Japón, Alemania, Gran Bretaña, Francia, Italia, Canadá y Rusia representaban el 58% de la economía mundial en 2007 según los precios actuales, indican las cifras del Fondo Monetario Internacional, comparado con un 65% diez años antes.
En momentos en que los miembros del G-8 han dejado muy atrás sus periodos gloriosos de crecimiento económico en las décadas posteriores a la Segunda Guerra Mundial, otras naciones han avanzado con economías a las que hay que tener en cuenta.
La principal es China. Su economía de 3.4 billones de dólares (correcto) es la cuarta del mundo, pisándole los talones a la tercera, Alemania. Brasil tiene la décima economía del mundo, detrás de Canadá, pero delante de Rusia. Después de Rusia está la ascendente India.
NO ES SÓLO CUESTIÓN ECONÓMICA
Los cinco países mencionados por Brainard incluyen potencias militares y los dos con mayor población en el mundo, China e India. En el debate sobre el calentamiento global, China compite con Estados Unidos como los mayores contaminantes.
“El mundo ha cambiado notablemente”, afirmó Robert Hormats, vicepresidente de Goldman Sachs (Internacional), que ayudó a los presidentes Gerald Ford, Jimmy Carter y Ronald Reagan a prepararse para las cumbres económicas. “La nueva estructura del poder mundial no es lo que era”.
No sería la primera vez que el G8 cambie la nómina de afiliados.
El grupo sostuvo su primera cumbre en Francia en 1975 con seis miembros: Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania Occidental, Italia y Japón, además del país anfitrión. Canadá se incorporó al año siguiente. Rusia se unió en 1997.
En años recientes la lista de participantes a la cumbre ha aumentado, aunque las naciones del club exclusivo siguen con sus propias reuniones.
Un total de 22 jefes de Gobierno -los ocho del club, siete de África y varios de otras economías prominentes- participarán en la cumbre en Toyako.
Impiden a 19 activistas entrar a Japón
Las autoridades japonesas han impedido la entrada en el país de 19 miembros de una ONG que tenían planeado asistir a un foro en Hokkaido (Norte de Japón), que se celebra de forma previa a la cumbre del G8, informó ayer Kyodo.
Los activistas, de nacionalidad sudcoreana, pertenecen a la Organización No Gubernamental “La Vía Campesina”, con sede en Yakarta (Indonesia).
Según la agencia de noticias, los miembros de la organización llegaron al aeropuerto de Chitose, cerca de Sapporo (Hokkaido), procedentes de Seúl el jueves por la tarde.
Las autoridades migratorias niponas les preguntaron si habían participado alguna vez en manifestaciones y posteriormente les denegaron la entrada tras alegar que las actividades que se supone que iban a desempeñar en Japón “no estaban claras”.
El acto al que tenían pensado acudir los activistas este fin de semana es una reunión alternativa a la del G8, que se centrará en el cambio climático y su impacto en el suministro alimentario.
La Vía Campesina planea organizar otros foros y conferencias durante los próximos días en Hokkaido, según Kyodo.