Ahorrar, no invertir ni gastar de más, son algunas de las opciones para mantenerse firme y con una saludable economía ante la actual crisis económica mundial.
Francisco Arias, asesor financiero de la operadora y distribuidora de fondos de inversión Skandia, asegura que lo recomendable es el ahorro a largo plazo. “La gente tiene que hacerlo para mantener su inversión de preferencia con un rendimiento fijo y no variable, iniciar con un porcentaje discreto y poco a poco ir aumentando el riesgo”.
Para las personas promedio con ingresos de 15 mil pesos o menos es una buena opción y el porcentaje de destinado a ello debe ser aproximadamente 30 % de sus percepciones, dependiendo de los gastos de cada familia o individuo. “Sin duda es un panorama difícil; la situación no es la óptima. Todavía no se ve el fin y mucho menos para invertir en renta variable”.
En contraparte, explica, el problema con las tarjetas de crédito tiende a incrementarse y es aconsejable no pagar los mínimos porque van “comiendo” al deudor y las tasas de interés tienen una tendencia a aumentar.
“Las tarjetas se deben usar sólo para una emergencia, necesidades reales, no en lujos, no gastar de más, no gastar lo que no se tiene; por ejemplo, si obtiene 10 mil pesos de sueldo y gasta 8 mil en el pago de los plásticos y tiene gastos de 4 mil pesos, comienza a deber y si paga el mínimo de la tarjeta, entonces en lugar de generar intereses los paga y no se fomenta el ahorro”.
De forma fácil y para dejar atrás las deudas a los bancos, un ejercicio sano para sus finanzas es, dependiendo de la capacidad de pago de cada persona, dividir el total del adeudo como si fuera un plan fijo. Por ejemplo: si debe 12 mil pesos, hay que dividir la cantidad en un plan tomando en cuenta los intereses y tener una meta para liquidarlo ya sea en seis, 12 o 18 meses.
Debe tomar en cuenta que los costos anuales totales de los bancos pueden ser de 50%, y abonando el mínimo cubre el interés y quizá 1% de la deuda; por ende, es preferible bajarle por lo menos 5% a su monto, aparte de los intereses para que se dosifique correctamente y sea cabalmente liquidable.
Ante los gastos de fin de año y la cuesta de enero que se avecinan, el experto dice que antes mucha gente ahorraba el aguinaldo; ahora lo utiliza para las compras, pero debe sólo utilizar eso, no dar regalos caros que no puedan pagar con sus ingresos, no gastar lo de un sueldo extra, porque estaría gastando 10% de todo su ingreso anual y eso le va a perjudicar.
“De preferencia hay que evitar comprar sin promoción o a meses sin intereses; es mejor hacerlo en rebajas y comparar precios para un mejor rendimiento del dinero”.
