Andrés Manuel López Obrador dio a conocer un manifiesto en el que advierte que el fraude del 2006 "no canceló, sólo pospuso, los anhelos democráticos del pueblo mexicano. No nos quitarán el derecho a la esperanza".
Sin aceptar preguntas, el ex candidato presidencial leyó un documento en el que añadió el nombre de José Luis Barraza y Gastón Azcárraga, al grupo de empresarios que se aliaron a la "confabulación en su contra".
Los otros involucrados son los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari y Vicente Fox; Felipe Calderón, Elba Esther Gordillo, Roberto Hernández y Claudio X. González además de ocho gobernadores del PRI, de los que no precisó su nombre.
López Obrador dijo que el fraude causó un daño inmenso a la nación: "frenó el avance democrático del país, socavó a las instituciones, envileció por entero a la llamada sociedad política, y quien actualmente se ostenta como Presidente de la República no sólo carece de autoridad moral, sino que su ineptitud es cada vez más evidente".
Lo más lamentable, dijo, es que como consecuencia del fraude se agravó la situación económica y social de la mayoría de los mexicanos, porque si antes todo iba mal, ahora todo ha empeorado.
Aseguró que hay más pobreza, desempleo, carestía, y se han desbordado la inseguridad y la violencia.
Dijo que si se hubiera respetado el voto ciudadano, no se estaría padeciendo o por lo menos, los problemas se estarían enfrentando realmente y no habría el desaliento ni la frustración que hoy embarga a amplios sectores de la sociedad.