Alrededor de 2 mil personas marcharon ayer en la Ciudad de México en conmemoración de los 55 años del asalto al cuartel Moncada. (AP)
Llama el presidente cubano Raúl Castro ‘a poner la casa en orden’, realiza durante la celebración un balance de su Gobierno.
Con un discurso en el que llamó a poner la casa en orden: desde la eficiente distribución de la leche hasta responsabilizar a sus ministros por los proyectos prometidos, el presidente Raúl Castro cerró el acto de conmemoración de 55 aniversario del asalto al cuartel Moncada y el cuartel Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo.
“Cuando imaginamos 50 años hacia adelante parece algo muy lejano, pero al pasar revista a los últimos 55 años pienso que realmente han transcurrido muy rápido. Ninguno de nosotros soñó con estar aquí hoy cuando asaltamos el Moncada”, rememoró Castro.
Ante unos 10 mil invitados al mitin en esta ciudad oriental -a unos 900 kilómetros de la capital-, el mandatario hizo un balance de las obras que realiza su Gobierno, desde carreteras reparadas hasta el avance de la industria niquelífera y del turismo.
“Junto a la producción, la defensa continuará sin descuidarse, independientemente del resultado de la proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos”, advirtió también el gobernante en relación con los comicios de noviembre.
Washington sostiene un férreo embargo a Cuba para presionarla a realizar cambios en su modelo comunista. La isla denunció que las sanciones limitan su desarrollo y debe reforzar su defensa ante una posible hostilidad militar.
En su discurso, mucho más corto y concreto de los que solía hacer su hermano, el convaleciente Fidel Castro, Raúl insistió en que la actual situación internacional de altos precios de combustible y alimentos impactará en la isla retrasando los deseos de mejoras económicas para la población.
Castro reconoció además que muchas opiniones están en contra de su propuesta de una nueva Ley de Seguridad Social que incrementa en un lustro los años de servicio para poder jubilarse (de 60 a 65 en hombres y de 55 a 60 en las mujeres).
Aprovechó la ocasión para asegurar que su Gobierno está dispuesto a escuchar todos los comentarios, incluidos los que no estén de acuerdo.
“No aspiramos a la unanimidad que suele ser ficticia, en éste (la Ley jubilatoria) o cualquier otro tema”, señaló el mandatario. Oriundos de esta región de la isla, Fidel y Raúl Castro lideraron el fallido asalto al Cuartel Moncada en 1959, el primer acto de rebelión que se transformó en guerrilla y seis años después derrocó al dictador Fulgencio Batista.
La última vez que Fidel Castro apareció en público fue hace exactamente dos años, en una de la celebración por esta fecha. Después, tuvo que ser operado, por lo cual su hermano Raúl debió tomar el poder, primero interinamente y desde febrero de manera formal.
Se unen mexicanos a celebración cubana
Alrededor de 2 mil personas marcharon ayer en la Ciudad de México en conmemoración de los 55 años del asalto al cuartel Moncada que dio inicio a la revolución cubana.
Convocados por el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, organizaciones sociales partieron del Hemiciclo a Juárez y se dirigieron a la Embajada de Estados Unidos para protestar por el bloqueo económico contra la isla.
En la marcha participaron miembros del Comité del 68, Frente Popular Francisco Villa, la Alianza de Tranviarios de México, de la Central Unitaria de Trabajadores y campesinos de San Salvador Atenco, del Estado de México.
Frente a la sede de la Embajada de Estados Unidos, resguardada por granaderos, miembros del Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, del Comité del 68 y de San Salvador Atenco señalaron que Cuba es un ejemplo de la defensa de la soberanía y símbolo de la resistencia. Exigieron el cese al bloqueo económico contra la isla y la liberación de los presos políticos.