Sergio Luis Llano, subdelegado de Planeación de Sagarpa, afirmó que los narcoinvernaderos de Pánuco de Coronado nunca han recibido apoyos federales.
Los invernaderos de Pánuco de Coronado nunca han recibido apoyos oficiales, dice
Aunque el riesgo puede existir, Sagarpa dice que antes de otorgar subsidios a los productores revisa ampliamente que éstos en realidad sean gente del campo, a fin de evitar que los recursos oficiales acaben en las parcelas del narcotráfico.
Sergio Luis Llano, subdelegado de Planeación de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación en Durango (Sagarpa), afirmó que los narcoinvernaderos de Pánuco de Coronado nunca han recibido apoyos federales.
Y al ser cuestionado sobre las declaraciones del diputado federal José Rosas Aispuro, en el sentido de que existe el riesgo de que algunos subsidios puedan acabar en cultivos de droga, el funcionario federal consideró lejana esa posibilidad en la entidad.
INVERNADEROS
El Subdelegado de Sagarpa en la entidad dejó claro que los apoyos que otorgó hasta el año 2007 la dependencia para la instalación de invernaderos, sobre todo para cultivo de tomate, eran a lo mucho por una cantidad de 500 mil pesos como tope máximo.
En tal sentido, expuso que a partir de este año entran cuatro nuevos proyectos de invernaderos con entre 11 y 16 módulos cada proyecto, los cuales reciben un apoyo federal cercano a cuatro millones de pesos cada uno.
No obstante, se refirió a las cantidades pues aclaró que la tecnología utilizada por los narcoinvernaderos localizados por el Ejército en el municipio de Pánuco de Coronado es de muy alto valor, ya que se estima todo el complejo en más de 30 millones.
VIGILANCIA
Sergio Llano puntualizó que a la hora de aprobar una solicitud o un proyecto, la Sagarpa vigila a fondo que se trate realmente de un productor rural lícito, a fin de evitar que gente ajena al sector social del campo duranguense pueda acceder a estos recursos.
Indicó que lo que se busca en la mayoría de los programas es incentivar a los productores de más escasos recursos, con lo cual se desactivan los riesgos de que recursos oficiales vayan a parar a actividades ilícitas como la siembra de enervantes.
Finalmente, agregó que el personal de la Sagarpa no tiene facultades para entrar a propiedades privadas a revisar la actividad agrícola o pecuaria que realizan, menos aún si no son beneficiarios de programas federales operados por esta Secretaría.
