Los habitantes del ejido San Nicolás observaron el trabajo que hizo la maquinaria para reforzar los bordos de protección en los límites de esta comunidad.
Rodea el agua al poblado San Nicolás, que se encuentra muy cerca de la Laguna de Mayrán.
El Ayuntamiento de San Pedro y el Gobierno del Estado de Coahuila se dieron a la tarea de reforzar los bordos de protección en los ejidos que están cercanos al cauce del río Nazas para prevenir posibles inundaciones ahora que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) liberó más agua de las presas.
El Siglo de Torreón realizó un recorrido por el ejido San Nicolás que prácticamente está rodeado por el agua que está llegando a la Laguna de Mayrán, ahí también había maquinaria reforzando los bordos de protección, pero los habitantes de esta comunidad aseguran que no se van a inundar porque la laguna es inmensa.
Jesús Fernando Fernández Mier, titular de Protección Civil, coincidió con los habitantes de San Nicolás, pues aseguró que esta comunidad no se inundó en las avenidas del río en 1968 y 1991, aunque en los alrededores de este ejido el agua corre en todas direcciones porque ahí nace la Laguna de Mayrán.
“Hasta ahorita no tenemos problemas, mañana el río va a traer un volumen de aproximadamente 270 litros por segundo y podemos aguantar fácil hasta 350 litros, pero estamos tomando todas las precauciones y seguimos reforzando los bordos de protección, es muy difícil que San Nicolás se inunde, porque está en alto y porque el suelo es muy arenoso y absorbe mucha agua”, dijo.
El alcalde, Jorge Arturo Babún Moreno, realizó un recorrido para supervisar las acciones que se estaban realizando con maquinaria para reforzar los bordos de protección en los ejidos Guadalupe, San Francisco, San Miguel, Cleto y San Nicolás.
Durante el recorrido por la Laguna de Mayrán este medio de comunicación pudo constatar que el agua empieza a dispersarse en todas las direcciones en esta planicie, a las afueras del ejido San Nicolás el agua inundó un cultivo de escoba que se perderá porque no hay manera de que la corten.
