Samantha Power, asesora en política exterior, calificó de ‘monstruo’ a Hillary Clinton.
Una asesora del candidato presidencial estadounidense Barack Obama que llamó “monstruo” a su rival Hillary Rodham Clinton, dimitió ayer.
Samantha Power, asesora en política exterior de Obama y ganadora de un premio Pulitzer, anunció su renuncia en una declaración difundida por la campaña del senador en la que “lamentó profundamente” la expresión.
“El pasado lunes hice comentarios inexcusables que distan mucho de mi reconocida admiración por la senadora Clinton y del espíritu, tenor y propósito de la campaña de Obama”, indicó la asesora. “Y comunico mis más sinceras disculpas a la senadora Clinton, al senador Obama y al notable equipo con el que he trabajado estos 14 meses”.
Power había dicho al diario escocés The Scotsman que Clinton se rebajó a utilizar tácticas rastreras a fin de obtener la postulación presidencial de su partido. La profesora de la Universidad de Harvard indicó al diario que el equipo de Obama ha quedado decepcionado con la victoria obtenida el martes por Clinton en Ohio.
“En Ohio, están obsesionados y Hillary lo ha resaltado porque sabe que Ohio es el único lugar que puede ganar”, dijo Power. “Es un monstruo, además -y esto no es para publicar- se ha rebajado a cualquier cosa”.
Power emitió el martes una declaración en la que admitió haber formulado los comentarios, pero insistió que los “lamentaba profundamente”.
“Es una equivocación que alguien utilice en esta campaña expresiones tan negativas y personales”, agregó en una declaración. “Pido disculpas a la senadora Clinton y al senador Obama, quien dejó en claro que estas expresiones no deberían tener lugar en la política estadounidense”.
El vocero de Obama Bill Burton indicó que los comentarios no se atienen a las opiniones del senador.
“El senador Obama lamenta dichas expresiones que carecen de lugar en esta campaña”, agregó Burton.
Aunque Power intentó retractarse de inmediato, el diario insistió que antes de la entrevista la asesora acordó que todo lo dicho tendría carácter oficial.
La entrevista con el The Scotsman tuvo lugar al día siguiente que el vocero de la campaña de Clinton comparara a Obama con el fiscal independiente Kenneth Starr.
Convierte Hillary Clinton los pantalones en uniforme de batalla
Hillary Clinton, una de las figuras más admiradas y polémicas de Estados Unidos, convirtió su insustituible traje sastre de pantalón en uniforme de batalla para su vida política, e incluso ella habla de su vestimenta como símbolo de masculinidad.
“No hay duda de quién llevará los pantalones en mi Casa Blanca”, dijo Hillary después de que la incursión de su esposo William Clinton en la campaña electoral generó especulaciones sobre quién daría las órdenes políticas en la residencia presidencial de ganar los comicios de noviembre próximo.
Incluso, cuando la conductora de la cadena CNN, Campbell Brown, cuestionó en el debate demócrata de Las Vegas, Nevada, la inclinación de Clinton por “evitar tomar posiciones firmes en temas controvertidos”, la senadora demócrata reviró: “mis pantalones son de asbesto”.
Ciertamente, Clinton ha estado mucho tiempo en el “asiento candente” de críticas políticas, no sólo en la actual campaña electoral, sino durante su época como primera dama estadounidense, en especial cuando buscó sin éxito una reforma integral del sistema de salud.
Pero fue hasta su campaña por la nominación demócrata a la Casa Blanca cuando surgió la posibilidad real de que se convirtiera en la primera mujer presidenta en la historia de Estados Unidos, que se volvió blanco de un escrutinio sin precedente, hasta por su forma de vestir.
En el mejor de los casos, se ha indicado que Hillary usa traje sastre para esconder el tamaño de sus muslos, de sus caderas y tobillos. Pero hay quienes la han llamado como un “Hugo Chávez en traje”, según ironizó el columnista P.J. Rourke. (Notimex)