El consejero presidente del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), José Núñez Castañeda, presentó su renuncia al órgano electoral bajo el argumento de "imposibilidad ética" para continuar en el cargo de un órgano al cual, según él, le arrebataron la autonomía.
Lo anterior al considerar que la reforma electoral aprobada hace unos días por los diputados locales despojó al IEEM de autonomía y, por tanto, quedó en manos de los partidos políticos.
El ahora ex presidente del órgano electoral acudió a las instalaciones del Poder Legislativo local para presentar su dimisión oficial y por escrito ante la Junta de Coordinación Política.
En el oficio que entregó a la LVI Legislatura local expone que no puede continuar al frente del IEEM debido a una cuestión ética, ya que los órganos electorales deben estar dotados de autonomía, y tras la reciente reforma electoral en el estado los partidos se la quitaron.
Núñez Castañeda precisó que desde su punto de vista el Congreso mexiquense es el verdadero actor que operará en el IEEM, mediante la instauración de la figura de secretario general ejecutivo.
Consideró que el establecimiento de esta nueva figura implica un retroceso en la legislación electoral mexicana, por lo que ninguno de los tres principales partidos políticos con presencia en el estado de México se salva de la condena de la historia.
Dijo que las excesivas atribuciones de este funcionario, -el secretario general ejecutivo-, radican en que "solamente lo puede remover el Legislativo con un juicio casi político, y en que le dan el monopolio de ser el único que podrá proponer los nombramientos de director al órgano, con lo que le restan al consejo electoral la facultad de nombrar a sus subordinados.
Núñez Castañeda asumió el cargo en 2005, luego del escándalo en el que se vio envuelto el anterior Consejo General por presuntos sobornos a consejeros electorales durante la contratación de la empresa Cartonera Plástica.