El primer ministro italiano, Romano Prodi presentó esta noche su renuncia ante el presidente de la República, Giorgio Napolitano, tras no lograr el voto de confianza en el Senado que necesitaba para poder continuar, confirmó la jefatura de Estado.
En un comunicado, leído por el secretario general de la presidencia de la república, Donato Marra, se especificó que Napolitano 'pidió al Gobierno dimisionario a permanecer en el cargo para cumplir los asuntos corrientes'.
'El Presidente de la República, Giorgio Napolitano ha recibido esta noche, en el Palacio del Quirinale, al presidente del Consejo de Ministros, Romano Prodi, el cual, tras informar sobre el resultado negativo del voto de confianza en el Senado de la República, firmó la dimisión del Gobierno por él presidido', citó el texto.
'El jefe de Estado ha invitado al Gobierno dimisionario a permanecer en el cargo para cumplir los asuntos corrientes', añadió.
Informó que las consultas con las fuerzas políticas, necesarias según la praxis institucional, iniciarán la tarde de ese viernes, con los presidentes de las dos cámaras del Parlamento (Franco Marini del Senado y Fausto Bertinotti, de la Cámara de diputados).
'El calendario de los encuentros será dado a conocer lo más pronto posible', añadió el comunicado.
Prodi, quien perdió por 161 votos en contra, 156 a favor y una abstención, se dirigió poco después de las 21:00 horas locales (20:GMT) al Palacio del Quirinale para presentar su dimisión.
Ahora corresponde a Napolitano iniciar las consultas políticas para decidir si convoca a elecciones anticipadas o forma un gobierno técnico encargado de los asuntos administrativos y de la reforma de la ley electoral, considerada parte de la inestabilidad política.
Por su parte, el líder de la oposición, Silvio Berlusconi se apresuró a iniciar su campaña y ante las cámaras de la televisión pública (RAI) dijo que presentará un programa electoral en el que establecerá los compromisos para sus eventuales primeros 100 días de gobierno.
Berlusconi, que en su residencia romana del Palacio Grazioli llamó a brindar a sus correligionarios por la caída del gobierno de Prodi, insistió en la necesidad de ir inmediatamente a las urnas.
También se acercó a sus antiguos aliados, Gianfranco Fini, líder del postfascista partido Alianza Nacional y Umberto Bossi, de la Liga del Norte, de los que se había distanciado luego que en noviembre pasado llamó, sin consultar, a formar el nuevo Partido de la Libertad.
Según medios locales, Berlusconi a quien los sondeos dan como favorito, ya tiene una fecha precisa para las elecciones: el próximo 13 de abril y se presentaría nuevamente aliado con Alianza Nacional y con la Liga del Norte.
También buscaría recuperar a su otro ex aliado, Pierferdinando Casini, del partido Unión Demócrata de Centro (UDC), con el que había roto.
Asimismo, Berlusconi dijo que podía acoger como aliado al ex ministro de Justicia, Clemente Mastella, del ex democristiano partido Unión Demócrata por Europa (UDEUR), causante de la crisis tras haber retirado su apoyo al gobierno de centroizquierrda.