La confianza de los consumidores estadounidenses repuntó ligeramente en julio, aunque siguen preocupados sobre la atmósfera económica, la inflación y el empleo, reveló hoy The Conference Board.
De acuerdo con la organización privada de análisis económicos, el índice de confianza subió a 51.9 puntos en julio, siendo el primer avance registrado desde diciembre pasado. El mes anterior se situó en los 51 puntos, el nivel más bajo de los últimos 16 años.
Pero pese a este moderado repunte de julio, el índice de confianza de los consumidores sigue acumulando una caída de más de la mitad desde el año pasado por estas fechas, cuando se situaba en los 111.90 puntos.
Por otro lado, el índice que mide la percepción de los estadounidenses acerca de las condiciones actuales de la economía apenas varió respecto del mes anterior y se situó en 65.3 puntos, desde los 65.4 puntos de junio.
El índice que mide las perspectivas que tienen los consumidores sobre el comportamiento de la economía a un plazo de seis meses subió a 43 puntos, desde los 41.4 puntos de junio.
El sondeo mensual de The Conference Board entre una muestra de cinco mil hogares reveló que un 32.8 por ciento de encuestados considera que las condiciones de negocio son ‘malas’ en estos momentos, comparado con el 31.9 por ciento que opinaba así hace un mes.
En cuanto a los próximos meses, un 32.4 por ciento espera que la situación económica empeore en los próximos seis meses, frente a un 33.5 por ciento que opinaba así hace un mes.
Asimismo, The Conference Board dijo que su medición sobre expectativas de inflación bajó a 7.6 por ciento tras haber alcanzando un alza máxima de 7.7 en mayo y junio.
Una de las causas de la mejora ligera en estos índices sería la reciente bajada en los precios del crudo, que podría convertirse en una tendencia en el corto plazo. Por otro lado, estas buenas noticias contrastaron con la de que los precios de las viviendas registraron en mayo pasado la mayor caída de su historia demostrando que los problemas siguen en el mercado inmobiliario y que aún falta para que se estabilice.
De acuerdo con el índice Case-Shiller elaborado por Standard and Poor’s, el precio de las casas en 20 grandes ciudades cayó 15.8 por ciento en mayo comparado con el año anterior, una tasa récord desde la creación del indicador hace 19 años. Respecto a abril, cuando la bajada fue del 15.1 por ciento, cayó un 0.9 por ciento.