El Gobierno de México reconoció oficialmente, por primera vez, que realizó un rescate financiero de la Comercial Mexicana, compañía que tendrá un plazo de hasta dos años para liquidar la deuda contratada a tasas altas.
“Es un rescate y no queremos que sea una forma de vida; lo que buscamos es que en la primera oportunidad nos cambien por un crédito más barato”, dijo Mario Laborín, director de Nacional Financiera (Nafin).
Al reunirse con la Comisión de Hacienda, explicó que la Comercial Mexicana tiene una línea de crédito de hasta 3 mil millones de pesos, pero arrancó con mil millones de pesos.
“Los 3 mil millones de pesos van a ir llegando de acuerdo con las garantías que vayan poniendo”, dijo el directivo.
Laborín comentó que a la Comercial Mexicana se le pidieron de garantías sus tiendas, porque 90% de las acciones de las empresas cayeron en las últimas semanas.
“Nos sentíamos más vulnerables con las acciones y más cómodos con las garantías de las tiendas”, dijo.
Añadió que los créditos para la empresa del pelícano deben ser utilizados al ciento por ciento para pagar a los proveedores.
Informó a los legisladores que “las tasas que estamos comprando tienen una TIIE más cinco puntos, cuando la que se ofrece en otros casos es TIIE + 0.5 puntos y las empresas que adquieran los créditos deben poner garantías de 1.5 a 1”.
En su presentación, Laborín dio a conocer las empresas que han solicitado apoyo gubernamental para enfrentar los problemas de liquidez, los cuales son: Cementos Mexicanos, mil 419 millones de pesos; Soriana, mil 50 millones de pesos.
Además de Banregio, 670 millones de pesos; Coppel, 650 millones; Crédito Real, 400 millones de pesos; Navistar, 335 millones; Factoring Corporation, 249 millones y 201 millones de Unifin.
