Luis Flores, asesor financiero reconoció que México tiene mecanismos de transmisión directos de la crisis de Estados Unidos.
Asegura especialista que México tiene mecanismos de transmisión directos de la situación económica de EU.
La economía mexicana resiente la crisis financiera y económica de Estados Unidos. Su gran dependencia comercial, la baja sustancial del envío de remesas, la volatilidad en el precio del crudo, la baja en el empleo y en las ventas, son indicadores evidentes de una baja en la dinámica económica.
Luis Flores, portafolio manager de RBC Wealth Management con sede en Toronto, Canadá, reconoció que la crisis financiera que enfrenta la Unión Americana no tiene precedente alguno, ya que es mucho más grande a la observada en 1929.
Indicó que ahora la particularidad de la crisis es que afecta a los usuarios del crédito, el cual es necesario porque es el motor para que las empresas funcionen, se realicen inversiones, se generen empleo y se hagan compras de bienes e inmuebles.
“Por ello preocupa esta situación al Gobierno americano y los efectos que tendrá dentro de su economía”.
El presidente de Canacintra, Miguel Marón Manssur, coincidió también en señalar que la industria nacional ya muestra las primeras señales de debilitamiento debido a la incertidumbre mundial originada por la desaceleración económica y crisis financiera de Estados Unidos
Por su parte, Flores señaló que sus efectos en México ya se han reflejado principalmente porque es la economía que tiene una gran dependencia comercial con el vecino país del Norte, ya que el 90 por ciento de las exportaciones se hacen con él.
Después del petróleo, las remesas es la segunda fuente de ingreso importante para el Gobierno, sin embargo, la caída en la actividad económica en la Unión Americana, con una tasa de desempleo del 6 por ciento, ha provocado que los inmigrantes mexicanos queden sin empleo.
Por ello, muchas comunidades en Zacatecas, Durango, Michoacán o el Bajío ya están resintiendo la falta de empleo de sus compatriotas, ya que los envíos son escasos o simplemente no se mandan como antaño.
Otro elemento importante es el petróleo. Los problemas para realizar reinversiones en infraestructura y exploración, sin contar la caída en su precio recientemente, han obligado al Gobierno en aplicar recortes a sus programas anuales, por lo que bajarán las obras de infraestructura ante una disminución del ingreso.
Todo se refleja en menor empleo, una menor actividad económica y en bajas ventas dentro del país.