Se han implementado programas para que los graffiteros realicen pintas con sentido más artístico.
Durango. Casas, escuelas, monumentos y hasta las iglesias son víctimas de las pintas que realizan los jóvenes, en su mayoría menores de edad; a pesar de todo la Dirección de Seguridad Pública Municipal argumenta no tener índices de reincidencia en quienes son detenidos.
Programa. El 2007 la Dirección Municipal de Seguridad Pública estableció el Programa de Rehabilitación de Lugares Públicos, esto cuando han sido víctimas de pintas con aerosol, que consiste en orientar a los graffiteros que son detenidos en pleno delito para que junto con sus padres de familia reparen el daño que han causado mediante tres procesos que se realizan previamente.
En el momento en que un joven es detenido por graffiti, es llevado a la cárcel municipal pero no para ser detenido, sino para recibir una plática en la que están involucrados tres departamentos: Psicología, Trabajo Social y uno de los responsables del programa. Se manda llamar a los padres de familia para que se percaten de la falta cometida por el menor a fin de instarlos a reparar el daño.
Se han detenido 360 graffiteros, el 95 por ciento de ellos ha sido menores de edad.
