Enrique Castillo Sánchez Mejorada, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), reconoció que el financiamiento al sector privado apenas superó los niveles que se registraron en 1994.
Hace 14 años, los recursos que prestó la banca a la actividad productiva llegaron a 120 mil millones de dólares, mientras que al cierre de 2007 la cifra alcanzó los 140 mil millones de dólares.
El también director de Ixe Banco, en entrevista recalcó que, derivado de la crisis económica, transcurrió más de una década para tocar los mismos rangos de financiamiento... “y eso es una mala noticia”.
Lo que nos queda de lección, dijo, es que una crisis macroeconómica genera daños importantes e irreversibles en todos los sectores de la población.
Para el dirigente de los banqueros, el mayor reto del sector es avanzar en la bancarización.
En la actualidad, las entidades tienen presencia en más de 900 municipios del país, que abarcan a 85 por ciento de la población.
“Y si bien es cierto que no se puede tener un discurso triunfalista respecto de los niveles de bancarización, nos alienta ver cómo se amplía la capacidad de servicio a un mayor número de mexicanos”.
En este momento, dijo, todavía falta llegar a entre 7 y 8 millones de personas, aunque el gran desafío es abarcar todo el país.
No obstante, el presidente de la Asociación de Bancos de México recalcó que la única forma de avanzar es que se mantenga la estabilidad económica, fomentar el empleo y que el país siga como un destino importante para los inversionistas. Sobre la cartera vencida en tarjeta de crédito, insistió en que 93 por ciento de los usuarios se encuentran al corriente.
Y reiteró: “El incremento en la morosidad no se debe menospreciar ni sobredimensionar”.
Manifestó que en los próximos meses se espera un menor crecimiento de este indicador.
Enrique Castillo, quien se reelegirá un periodo más al frente de la asociación, comentó que en los últimos años la imagen de la banca mejoró. “No estamos donde quisiéramos, pero la vinculación con la sociedad es mayor”.
Esta evolución es resultado de una mayor competencia entre instituciones “y los bancos nuevos algo están haciendo por ofrecer mejores condiciones a los clientes”.
Sin embargo, comentó, por tradición hay una mala percepción de los banqueros a nivel mundial; y en México esta imagen se agravó en la crisis económica de 1995.
“La desvinculación y lo que se rompió derivado de la recesión alejó a la banca de sus usuarios”.
Pero ahora, los nuevos intermediarios buscan acercarse a la población de menores recursos, a través de una mayor oferta de productos.
Castillo Sánchez Mejorada aclaró que otro aspecto prioritario para el sistema es aumentar la cultura financiera a fin de que la gente tenga las suficientes herramientas para elegir mejor.
Una mayor información por parte de los clientes impulsará a la baja las comisiones y tasas de interés.
Por convencimiento y convicción, la ABM tomó la decisión de involucrarse más con la sociedad, agregó.
LLEGAN A MÁS
“Y si bien es cierto que no se puede tener un discurso triunfalista respecto de los niveles de bancarización, nos alienta ver cómo se amplía la capacidad de servicioa un mayor número
de mexicanos”.
ENRIQUE CASTILLO SÁNCHEZ MEJORADA,
PRESIDENTE DE LA ABM
