La actriz, quien visitó Austria para recibir su excéntrica “terapia sanguijuelesca”, dijo que no le importa revelar ese secreto de belleza ante el auditorio de David Letterman, en Nueva York. (Archivo)
El espectacular físico de Demi Moore, a sus 45 años, siempre ha sido objeto de comentarios. Ahora, en una entrevista la actriz revela el secreto de su juventud que consiste en dejarse chupar la sangre por sanguijuelas.
La actriz, quien visitó Austria para recibir su excéntrica “terapia sanguijuelesca”, dijo que no le importa revelar ese secreto de belleza ante el auditorio de David Letterman, en Nueva York.
“No se trata de sanguijuelas de pantano, son sanguijuelas médicamente entrenadas”, señaló la actriz en tono de broma.
Este tipo de terapia tiene una larga historia. Los médicos egipcios la consideraban una cura universal y la actriz ha retomado esa terapia que hoy en día se ha convertido en los más moderno.
“Mira, mentiría si dijera que no tengo momentos de pánico cuando miro al espejo y veo cosas colgando que antes no estaban ahí. Pero, ahora, lo que hago es centrarme en las cosas buenas”.
Por ejemplo, la actriz piensa en sus hijas, con las que ha posado para el reportaje fotográfico que acompaña la entrevista donde se muestra junto con ellas y su esposo, Ashton Kutcher.
“Tengo un matrimonio estupendo, una familia increíble”. Por eso, dice, “cuando miro en el espejo, el reflejo no es malo, porque veo la belleza de mi existencia”.