Una intervención telefónica dada a conocer por la policía italiana en el marco de una investigación por tráfico de influencias reveló una estrategia política del Vaticano para Cuba.
'Quieren hacer morir a Fidel (Castro) como católico; si logran esta operación, y (Tarcisio) Bertone es ya tres años que trabaja, meten la mano sobre Cuba y se la regalan a (Barack) Obama para la candidatura nueva', reveló la intercepción.
Se trata de una llamada telefónica entre el empresario Roberto Alessio y uno de los ex consejeros municipales del partido Democráticos de Izquierda (DS por sus siglas en italiano), Claudio Fedrazzoni, ambos arrestados esta semana acusados de corrupción.
El Bertone al cual se refieren en la conversación es el secretario de Estado del Vaticano, máximo responsable de la política interna y externa del sede católica, quien estuvo en Cuba en febrero pasado para conmemorar los 10 años de la visita de Juan Pablo II a la isla.
'Si les sale bien una operación de este tipo se meten a los estadounidenses en el bolsillo', continuó en la llamada Alessio quien poco antes había referido de encontrarse con el purpurado el 16 de marzo pasado, después de su viaje a tierras cubanas.
Los protagonistas de esta llamada telefónica fueron detenidos junto con el director del hospital pediátrico de propiedad del Vaticano 'Niño Jesús', Giuseppe Profiti, acusados de haber manipulado concursos públicos para favorecer a empresarios.
En el texto de la ordenanza de custodia cautelar, de 606 páginas, Roberto Alessio -dueño de varias empresas beneficiadas con contratos de concesión para comedores escolares y centros de salud- es definido como 'muy cercano' al secretario de Estado del Vaticano.
Este viernes la sala de prensa de la Curia Romana difundió una nota en la cual expresó su 'confianza plena y solidaridad' a Profiti, mientras sostuvo además su reconocimiento y 'disposición de colaborar' con las autoridades judiciales.
