Mientras los apoyos al campo no lleguen a tiempo, es mejor rezar, consideró el diputado federal Gustavo Pedro Cortés.
Campesinos siguen pagando los platos rotos
Durango. “Hay que ponerse a rezar, porque si nos atenemos a los apoyos que deben dar autoridades al campo no la hacemos”. Esto fue lo que dijo el diputado federal Gustavo Pedro Cortés, del PT, quien expuso que es una mentira que los apoyos del campo lleguen a tiempo para los agricultores y ganaderos de Durango.
Dijo que el recurso llega a destiempo y no cuando lo necesitan los productores, por eso comentó que lo único que hay que hacer es ponerse a rezar para que llueva, pues para él es la única salvación, ya que no se ve, por el momento, otra salida.
Burocracia y corrupción
El legislador manifestó que la entrega de los recursos de Procampo, a través de tarjetas, es cada vez más burocrática. Es más enredado y finalmente no se hizo más transparente, indicó. “Al final quién entrega los recursos… pues Sagarpa, nadie mete mano en esto”, señaló. Entre otras cosas también comentó, que éstos son los resultados por tratar de agilizar la entrega de los recursos con medidas inadecuadas.
Y agregó que es totalmente desatinado que la SAGDR, a través de Isaías Berumen, afirme que no hay muerte de ganado más allá del 1 por ciento, pues sólo hace falta darse una vuelta por el estado para ver la realidad.
