La directiva de Vaqueros Laguna puso atención, y en el aspecto deportivo hizo todo lo posible por cubrir los huecos que impidieron al equipo colarse al play off, al entrar en aquella racha de nueve derrotas consecutivas, seis frente a Tijuana y tres contra Sultanes. El primer paso es dar la oportunidad a un manager joven, que pertenece a la organización, y como coach que fue en la temporada anterior está involucrado en la problemática que marginó al grupo fuera de la postemporada.
Si algo preocupa a la directiva que encabezan Ricardo Martín Bringas y Carlos Gómez del Campo es el vestidor de Vaqueros Laguna, en teoría se contrataron los refuerzos apropiados y deportivamente el equipo luce en condiciones de pelear la supremacía en la Zona Norte, sobre todo al contar con un primero y cuarto bat, así como hacer importantes adiciones al cuerpo de lanzadores.
Lo único que falta para redondear el plantel es conocer el nombre del cuarto refuerzo extranjero, que a la vez pasará a ser el primer inicialista de la novena que va a manejar Ramón Esquer. Pero cuando no se ha dado una explicación clara sobre los motivos de aquella horrible racha de nueve derrotas consecutivas, salta a la vista que en el grupo existió un gran divisionismo, y lo más preocupante es que no sólo fueron dos, sino más los grupos en que se dividió el plantel.
Son indudables los conocimientos sobre el beisbol que tiene Ramón Esquer, pero quizá el reto principal del nuevo estratega va a ser mantener a un grupo unido, que verdaderamente jale hacia el mismo lado y con ello los objetivos de éxito sean más factibles de alcanzarse. Esquer como pelotero fue un hombre polémico, al que en ocasiones se tachó de “jugador problema” cuando el de Ciudad Obregón manifestaba sus inconformidades o bien peleaba por lo que consideraba sus derechos.
Para Ramón Esquer es una gran ventaja el hecho de que hace muy poco tiempo aún era pelotero activo y como tal deberá enseñar una facilidad natural para manejar las muchas situaciones difíciles que suelen presentarse a lo largo de una temporada como la de la Liga Mexicana de Beisbol. Igual en casa que en las giras, a la hora de imponer orden y disciplina en el grupo la situación suele complicarse, sobre todo cuando se cuenta con elementos difíciles, como los muchos que tendrá Vaqueros Laguna en su roster de 28 peloteros.
Hoy el exceso de tráfico en primera base, en el bateador designado y en la receptoría, parece un problema para Ramón Esquer, por lo que no se descarta que alguno o algunos elementos del plantel sean prestados a otros equipos con el fin de conservar sus derechos y darles la actividad que se requiere para que puedan convertirse en estelares. En 2007 fueron muchas las inconformidades provocadas por las decisiones de Marco Antonio Guzmán y posteriormente por Dan Firova, el estadounidense dijo que no era necesario cambiar las llantas si no estaban ponchadas; cuando el estratega dijo de esa manera que no se requerían movimientos, el carro ya estaba en cuatro piedras, las llantas habían desaparecido.
Decisiones como la de enviar a la banca a Rafael Castañeda, cuando el “Chivigón” bateaba cerca de los .400, a la larga pesaron mucho en el grupo, el veterano jugador perdió ahí mucho en su autoestima porque no importó el gran ritmo ofensivo que en esos momentos llevaba, la llegada del “Canelo” Canizález lo envió a la banca, en un movimiento a todas luces injusto. Ramón Esquer deberá tener mucho cuidado para no incurrir en injusticias a la hora de tomar sus decisiones, porque ese es un buen camino para alcanzar los objetivos de éxito que hoy se tienen en la organización.
Hoy en la institución naranja existe un interés muy especial en contratar peloteros deportivamente de mucha calidad pero con iguales condiciones en el aspecto humano. El beisbol representa una opción muy complicada a la hora de las fiestas, porque es un deporte que se juega todos los días con el único descanso de los lunes. El pelotero que muy seguido se dedique a la fiesta y a todo lo que ésta implica, necesariamente tendrá problemas, los cuales serán evidentes en el terreno de juego.
La lucha que se inicia el 20 de marzo será muy complicada para Vaqueros Laguna, porque equipos otrora cómodos, como Chihuahua, Tijuana o Monclova, tendrán planteles muy competitivos, la única duda parece ser Tecolotes de Nuevo Laredo, por la pobre herencia que recibe de los Rieleros de Aguascalientes, sin embargo, Sultanes de Monterrey, Saraperos de Saltillo y Pericos de Puebla han sido por tradición los abocados a llegar a la postemporada y a pelear por el título. Vaqueros Laguna ya ha hecho bastante ruido con sus movimientos, por lo que se espera que todo se conjugue para disfrutar de una temporada verdaderamente exitosa.