Semana clave se inicia esta noche para Vaqueros Laguna con seis juegos consecutivos en el Estadio de la Revolución, de martes a jueves, frente a Pericos de Puebla, y de viernes a domingo en contra de los Potros de Tijuana. Es importante recalcar la necesidad de no menospreciar a los rivales en turno, algunos comentarios rayan en el excesivo optimismo y eso puede traer como consecuencia sorpresas muy desagradables.
Es cierto, Vaqueros Laguna luce en el papel muy superior a sus rivales en turno, pero esa apreciación debe quedar a un lado y encarar cada uno de los seis compromisos con la mayor seriedad, como si enfrente estuviera esta noche el mejor equipo de la Liga Mexicana. Tanto Pericos como Potros tienen en sus filas jugadores con la capacidad suficiente para pelear palmo a palmo en cada partido, y si no, sólo basta recordar la limpia que Tijuana aplicó a los Dorados de Chihuahua en el Estadio Calimax.
En Vaqueros Laguna terminaron ya los días de Jan Carlo Granado, el lanzador zurdo de Venezuela se va con 2-1 en ganados y perdidos pero 6.55 de carreras limpias, inició siete partidos, lanzó 33 innings, le anotaron 24 carreras limpias, ponchó a 20 bateadores pero regaló la friolera de 33 bases por bolas. Es evidente que el equipo naranja necesita mucho más aporte de un refuerzo extranjero, y la paciencia de la directiva y el cuerpo técnico terminaron, porque a Granado le tocaba abrir uno de los partidos de esta semana en casa frente a Potros de Tijuana, pero para entonces ya habrá un reemplazo, también de brazo equivocado.
Vaqueros Laguna está en espera del contrato firmado de un zurdo estadounidense que en julio próximo cumplirá 29 años de edad, ha lanzado en ligas mayores con Bravos de Atlanta y Tigres de Detroit, en la última temporada trabajó 115 innings un tercio en los que regaló 35 bases por bolas y ponchó a 83 bateadores, un balance muy positivo que resulta interesante. El lanzador es recomendado por Eliseo Rodríguez, aquel receptor puertorriqueño que brillara con los Cafeteros de Córdoba de Chara Mansur Julián y ahora está dedicado a la promoción de peloteros, Eliseo Rodríguez mantiene buena amistad con Felipe Rodríguez y por ahí vino el contacto para traer al nuevo lanzador.
Hoy no es posible conocer más detalles sobre el refuerzo porque aún se está en espera de recibir el contrato firmado, la negociación ya está lista y sólo falta la rúbrica del pelotero en el documento correspondiente; se espera que el nuevo lanzador llegue al Distrito Federal el próximo jueves, el viernes estará en la Conade para el examen antidoping y ese mismo día ya estaría uniformado con su nuevo equipo.
Carlos Gómez del Campo decía ayer que en este año no se quiere caer en la política de traer por traer peloteros, como se hizo en 2007; hoy la necesidad de remover a Granado ya se detectó y existe la certeza de que es lo mejor para el equipo. El presidente ejecutivo también comentaba que en la ofensiva no habrá movimientos, Gómez del Campo está contento con el repunte de Raúl González, con el regreso de Mario Valdez, el gran momento del “Peque” Valdez en la producción de carreras y espera que la ausencia de Luis Carlos García no se prolongue mucho, porque el de Hermosillo estaba en buen momento como cuarto en el orden al bat.
Destaca el directivo la labor de Iván Araujo, un pelotero todo entrega, que a pesar de sus problemas de salud durante la pretemporada, hoy vive un gran momento con el bat, y a la defensiva ha mejorado notablemente. Con Omar de la Torre está satisfecho, una vez que el tapatío ha hecho algunos ajustes que mejoraron su productividad con el madero. Gómez del Campo sabe lo que son los hermanos Héctor y Rafael Castañeda, quienes forman parte importante de la ofensiva, un departamento del que se espera bastante en la recta final de la primera vuelta.
Antes de viajar a Puebla y Tijuana, dos refuerzos extranjeros estaban en la cuerda floja, Raúl González y Jan Carlo Granado, el boricua ha levantado su productividad notablemente, ahora se le ve conectar a la hora importante y es evidente que el ser ubicado como tercero en el orden le ha favorecido, porque desde que ocupa esa posición curiosamente su ofensiva ha mejorado enormidades. Raúl González hoy parece un elemento confiable y es de esperarse que durante las series de esta semana en casa su aportación sea clave, como lo fue el sábado anterior en Tijuana.
A encarar entonces las series contra Puebla y Tijuana con la debida seriedad, como si se tratara de los mejores equipos de la liga, los “pichones” ya no existen y un comportamiento diferente podría traer como resultado sorpresas muy desagradables y sobre todo inoportunas, porque el final de la primera vuelta está cerca y es necesario terminar en un buen lugar.
