A una serie de finalizar la primera vuelta del calendario regular, los Olmecas de Tabasco le dieron las gracias a Orlando Sánchez, para darle el cargo como interino a José Bojórquez; la magia del boricua Sánchez parece haber terminado, y a pesar de este tropiezo, sus números como estratega en la LMB son positivos, quizá algún asunto extradeportivo haya influido para su salida de la organización tabasqueña.
Cuatro managers han sido cesados en lo que va del calendario, el primero resultó Fernando Elizondo, con los Petroleros de Minatitlán; aún se recuerda a Elizondo con Vaqueros Laguna en 2006, pero cuando el público se metió con él decidió renunciar, curiosamente dejó su lugar a Orlando Sánchez, hoy los dos están desempleados.
Posteriormente tocó el turno de Abelardo Vega, el popular “Cachorro” dejó el timón de los Potros de Tijuana, quienes en su lugar asignaron al venezolano Noé Maduro, aquí se dice que la salida de Vega fue para bajar los costos de operación, debido a que los equinos pasan por una crítica situación en el aspecto económico.
El tercer manager cesado fue otro que también ha dirigido a Vaqueros Laguna, Gerardo “Polvorita” Sánchez. Este elemento tuvo buenas actuaciones con la escuadra naranja, pero aquí se encontró con un presidente que gustaba de dirigir al equipo desde el palco central del Estadio de la Revolución, el originario de Guasave es el manager que más juegos ha dirigido a los naranjas, desde su nacimiento en el año 2003. Pericos dio el timón a Mario Mendoza, el chihuahuense que brilló por sus “manos de seda” en ligas mayores, pero como estratega no termina de consolidarse.
El cuarto turno entre los despedidos corresponde a Orlando Sánchez, el boricua del que ya se comentó, hizo su debut con Vaqueros Laguna con buenos resultados, pero algo hay en este elemento que no agrada a los directivos, porque a pesar de sus buenos resultados no logra mantenerse en los equipos. Es muy curioso, pero de los cuatro managers cesados hasta hoy, tres dirigieron a Vaqueros Laguna; en los últimos años los directivos del beisbol han enseñado poca paciencia y falta de planeación. Lo ocurrido en la pasada campaña de la Liga Mexicana del Pacífico es algo sin precedentes, cuando siete de los ocho manejadores fueron despedidos y el único que salvó la cabeza es Homar Rojas, de los campeones Yaquis de Ciudad Obregón.
En Vaqueros Laguna la danza parecía no tener fin, se inició en 2003 con Alex Taveras, que dejó su sitio a Roberto Méndez y éste a José Juan Bellazetín. Al año siguiente vino la era de Gerardo Sánchez, que dirigió en 2004 y parte de 2005, cuando Antonio Aguilera tomó su lugar, le siguió el peor estratega que hemos visto, Wes Clements, para que terminara Héctor Estrada, hoy al frente de los Piratas de Campeche.
Al año siguiente vino el turno de Fernando Elizondo, que no aguantó las críticas del público y decidió irse, para dar paso a la llegada de Orlando Sánchez, despedido ayer por los Olmecas de Tabasco. Vaqueros tuvo una gran segunda vuelta con Orlando, pero de cara a la temporada 2007, la directiva dio el cargo al “Buzo” Marco Antonio Guzmán, que no pudo con el paquete y fue relevado por Dan Firova, hoy al frente de Tecolotes de Nuevo Laredo.
Para 2008 Vaqueros Laguna tomó una decisión importante en su vida, al darle el timón a Ramón Esquer, el sonorense vive su temporada de debut en la Liga Mexicana de Verano y contra viento y marea cumplió una excelente primera vuelta, si toman en cuenta los obstáculos que en otros casos llevaron a varios equipos a los últimos lugares, como las lesiones o las bajas de juego, en el caso de Raúl González, Jan Carlo Granado y Melvin Nieves.
Ramón Esquer se hace manager en el mismo fragor de la batalla, los momentos difíciles han sido muchos cuando apenas se va a cumplir la primera mitad del calendario; algunos jugadores se han visto presionados por las rachas negativas que hubo, pero la decisión de la directiva parece la acertada, porque si se quiere tener un manager propio, joven y con un amplio panorama en el futuro, la mejor fórmula es hacerlo. Esquer, es cierto, se ha equivocado, pero en una balanza sus aciertos son mucho más que las fallas. Sólo como punto de comparación, hay que ver en dónde están los Dorados de Chihuahua, con el estratega más exitoso de los últimos años y con un plantel de mucha calidad, gracias a los Sultanes de Monterrey.