Rusia bombardea poblaciones en Georgia
Unas 1,500 personas han muerto en la violencia,
Rusia envió cientos de tanques y soldados a la provincia separatista de Osetia del Sur y bombardeó el sábado poblaciones de Georgia, en una importante escalada del conflicto que ha dejado por lo menos decenas de civiles muertos y heridos.
Georgia, un aliado de Estados Unidos cuyas fronteras en el Mar Negro limitan con Turquía y con Rusia, lanzó el viernes una gran ofensiva para recuperar el control de Osetia del Sur. Rusia, que tiene vínculos estrechos con la provincia separatista y tiene allí soldados del cuerpo de paz, respondió enviando tanques, vehículos blindados de transporte de personal, y aviones de combate.
El presidente georgiano Mijail Saakashvili propuso el sábado un cese de fuego en Osetia del Sur, mientras continuaban los combates por segundo día consecutivo.
Saakashvili, en una conferencia de prensa, también propuso imponer una separación entre las partes beligerantes.
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, informó a periodistas en Moscú que unas 1,500 personas han muerto en la violencia, y que la cifra de víctimas continuaba subiendo el sábado.
La cifra no pudo ser confirmada por fuentes independientes, pero testigos que huyeron de los enfrentamientos dijeron que cientos de civiles habrían muerto. Señalaron que la mayor parte de Tsjinval, la capital provincial, se hallaba en ruinas, y regada de cadáveres.
El bombardeo aéreo y de artillería dejó a la capital provincial sin agua, alimentos, electricidad o gas. Civiles aterrorizados salieron de sótanos rumbo a la calle en busca de comida, cuando la lucha menguó.
El general ruso Vladimir Boldyrev dijo el sábado en declaraciones por televisión que los soldados de su país habían desalojado a las tropas georgianas de la capital provincial. Testigos confirmaron que los soldados georgianos habían desaparecido de las calles.
El secretario del Consejo de Seguridad georgiano, Alexander Lomaia, dijo que la propuesta del presidente incluye el retiro de las fuerzas georgianas de Tsjinval, la capital de Osetia del Sur, las que dejarán de responder a la artillería rusa.