Jones ha tenido que pagar millonarias sumas de dinero a sus abogados y para ello tuvo que vender su casa de 2 millones de dólares y la de su madre. (Archivo)
La velocista estadounidense Marion Jones saldrá mañana de un centro correcional de San Antonio, Texas, sitio a donde fue sentenciada por haber mentido a las autoridades en un juicio por el uso de esteriodes y por su participación en un fraude con cheques bancarios.
Según el diario español AS, la atleta está ahora con un severo problema económico ya que su libertad es parcial. No podrá solicitar permisos para abrir empresas ni abrir una cuenta bancaria lo que pone en predicamenos las finanzas de la velocista que antes llegó a cobrar 55 mil euros por competencia.
Aunado a esta situación, Jones ha tenido que pagar millonarias sumas de dinero a sus abogados y para ello tuvo que vender su casa de 2 millones de dólares y la de su madre.
La que fuera estrella de los Juegos Olímpicos de Sidney al conquistar cinco medallas de oro que después delvolvió por dopaje, ahora vivirá junto a su marido el ex velocista Obadele Thompson y sus dos hijos en San Antonio.