Médicos neozelandeses salvaron la vida a un niño de 14 meses procedente de Timor Oriental tras extirparle un tumor benigno de 7.3 kilos, casi un tercio del peso de toda su masa corporal, informó la prensa local.
La operación tuvo lugar el pasado en un hospital de la ciudad de Wellington, donde diez doctores tomaron parte en la intervención al pequeño Ález Gonzaga, según la portavoz del centro médico, Trish Lee.
El tumor fue inicialmente descubierto por un doctor que viajó a Timor Oriental y examinó al niño.
De no haberse sometido a la operación, el pequeño habría fallecido con total probabilidad dado que el epitelioma ponía en peligro varios órganos vitales, explicó Brendon Bowkett, jefe del equipo de cirujanos.
Elisa da Conceiço, la madre de Álex, expresó su alivio por el éxito de la intervención y afirmó que espera poder tener muy pronto de nuevo en casa a su hijo.
Los médicos creen que podrá tener en alta en unos diez días.