Ante la incompetencia del Ayuntamiento, afectados por la construcción de una gasolinera piden la intervención de autoridades estatales, luego de los daños que han sufrido sus viviendas.
INSEGURIDAD
Afectadas señalan a empresarios de atentar contra sus vidas, mientras piden ayuda a las autoridades estatales, pues las municipales ya fueron rebasadas.
Sombrerete, Zac.- Ahora cayeron los muros de la casa de la señora Aidé Lazalde García y junto con Alicia Castrejón Partida solicitaron el apoyo de la gobernadora Amalia García Medina y del procurador, Ambrosio Romero Robles, para que apliquen la ley al empresario Ramiro Murillo Zepeda por atentar contra sus vidas.
Señalamiento. Relatan que los empresarios Murillo Zepeda y Cecilio Murillo, obstinados en construir una gasolinera en plena zona urbana frente al Hospital Integral y a escasos metros del templo de San Pedro, han destruido sus viviendas socavando los cimientos con maquinaria pesada.
El pasado 11 de noviembre cayeron los muros de la casa de doña Alicia Castrejón Partida, y los trabajadores que socavaron los cimientos de la cocina y de un cuarto estuvieron a punto de aplastarlas a ella y a su nieta Marisol Anguiano Ríos, de cinco años.
Denuncia. Indican que apenas el pasado 12 de noviembre interpusieron su denuncia ante el Ministerio Público por daños en propiedad ajena y lo que resulte, mientras alertaban de que se caería la otra vivienda.
Los pronósticos no fallaron, y este 14 de noviembre doña Aidé Lazalde García fue despertada por un estruendo a las 3:00 a.m. para descubrir junto con sus espantados vecinos que las paredes de su vivienda se habían venido abajo.
Las cuarteaduras se aprecian en las paredes de su vivienda y se extienden a los cuartos. Las otras viviendas aledañas también presentan cuarteaduras en las salas y cuartos.
Petición. Le piden a la gobernadora Amalia García que recuerde lo que pasó hace unos días en pleno centro de Zacatecas donde decenas de vecinos fueron evacuados por una fuga de gas.
Por otra parte, recordaron que desde agosto pasado, el alcalde Vicente Márquez bien pudo parar la obra, pero por miedo han dejado que el empresario Ramiro Murillo haga lo que quiera y las consecuencias han sido malas para ellas.
Señalan que ayer arribaron el secretario particular del Alcalde, Raúl Castruita Hernández, y el director de Obras Públicas, Juan Fernández Rivera, en compañía de Cecilio Murillo, pero las obras no han sido detenidas y ellos lo permiten.
Se echan la bolita. Ambos funcionarios sólo dijeron al empresario que debía pagar y éste señaló que quien debía pagar era su papá Ramiro Murillo, quien había hecho todo.
“Le pedimos a la Gobernadora que actúe a la brevedad ya que las autoridades municipales deben parar la obra utilizando a la fuerza pública pero no lo han hecho y son miedosas”.
Asimismo, enfatizaron que el día que se cayeron las primeras paredes hablaron con el alcalde Vicente Márquez, quien se dirigía a Zacatecas, pero en lugar de decirle que pararía la obra les dijo que pediría ayuda a Zacatecas.
Argumento. Por su lado, el Director de Obras Públicas les dice que es un hecho que Ramiro Murillo va a construir su gasolinera ya que tiene mucho dinero y hace lo que quiere.
Relatan que otro grave delito federal que cometió Murillo Zepeda es haber cortado un pirul de 30 años de antigüedad y 30 metros de altura, ubicado en un terreno que ya se apropió localizado junto a la vivienda de Aidé Lazalde.
Presumen que han recibido apoyo del regidor Elí Rosales Aguilar, quien ya tramita los apoyos y las denuncias necesarias para promover que el empresario Murillo Zepeda responda por sus graves actos originados por la ambición.
POR BRISIA ARLETTE RAMÍREZ
ESD
DATOS.
Desde agosto, Ramiro Murillo Zepeda empezó la construcción de la gasolinera, sin contar con permiso alguno.
Han pasado cuatro meses y el alcalde Vicente Márquez y el Director de Obras no han podido parar la obra.
El pasado 11 de noviembre el empresario destruyó la vivienda de Alicia Castrejón y por poco la mata, señala la afectada.
El pasado 14 de noviembre cayeron las paredes de la casa de Aidé Lazalde y su vivienda presenta graves daños.
¿Y las autoridades?
Es evidente la torpeza política de la presente administración municipal así como la falta de asesores legales, pues las autoridades no han sabido cómo actuar con la ley en la mano y, contrario a eso, lo han hecho en forma timorata.
El dicho equivocado del vulgo de que “las leyes fueron hechas para violarse” se aplica a la perfección en Sombrerete. Primero, por los propios gobernantes encabezados por el Alcalde, que al parecer no se han cansado de violentar la Ley Orgánica del Municipio así como la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos, como denuncian en cada sesión de Cabildo los regidores, y este mal ejemplo ha cundido entre los empresarios como el caso de Ramiro Murillo Zepeda.