El Gobierno Federal, a través de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), autorizó a la empresa Tecno Sistemas Ecológicos SA de CV, la habilitación de un centro de confinamiento de residuos peligrosos en el municipio de Viesca, cuya capacidad de almacenamiento sería cinco veces mayor a la de una empresa similar instalada en Ramos Arizpe, la cual dejó de operar tras incendiarse el 18 de diciembre pasado.
Frente a esto, el Ayuntamiento de Viesca, que encabeza el alcalde Mario Alcocer Gallardo, emprendió una cruzada para no otorgar los permisos municipales de construcción y de uso de suelo y evitar así la instalación del tiradero industrial.
A esta medida de rechazo se incorporó el gobernador Humberto Moreira Valdés, quien consideró que la salida para los problemas de pobreza del municipio no está en la instalación de una empresa que ocasione riesgos para la población y para el medio ambiente, sino más bien en el aprovechamiento de los atractivos turísticos naturales del lugar.
Dijo que junto al alcalde de Viesca iniciará en breve el diseño de un esquema para convertir a Viesca en un municipio donde el turismo ecológico se convierta en una fuente importante de ingresos monetarios.
“Lo que estamos viendo es mantener lo atractivo que es el municipio en la parte de las Dunas de Bilbao y que lo que llegue sean inversiones para el turismo y no que lo agarren como basurero ”, señaló.
La autorización
El 19 de enero de 2006, la Semarnat –encabezada entonces por el ahora director general de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo- emitió la autorización número 5-36-PS-VIII-05-2006, a través de la cual facultó a la firma Tecno Sistemas Ecológicos la instalación en Viesca, Coahuila, de un centro para la disposición final de residuos industriales y peligrosos.
De acuerdo con documentos oficiales que se pudo conseguir en la Semarnat, algunos de los cuales aparecen en el portal de Internet de la misma dependencia, la capacidad total del proyecto de “impacto y riesgo ambiental”, como lo denomina la propia Secretaría, sería de cinco millones 650 mil 391 metros cúbicos de material peligroso.
El centro podría almacenar cada año hasta 182 mil 500 toneladas de residuos que serían tratados a través de diferentes tecnologías.
En 2006, la Semarnat liberó en total cuatro autorizaciones para la apertura de igual número de centros de confinamiento de residuos industriales. Uno de ellos corresponde al de Viesca, otro al de Ramos Arizpe, el tercero es el proyecto “La Choya”, que se localiza en el municipio de Plutarco Elías Calles, Sonora y el último a Zimapán, en el estado de Hidalgo.
Sin embargo, es precisamente el Centro Integral para el Manejo, Tratamiento, Aprovechamiento y Disposición Final de Residuos Industriales y Peligrosos (Cimari, como se conoce a este tipo de proyectos) de Viesca, el de mayor capacidad de almacenamiento y, por consiguiente, el que una vez en operación generaría mayores riesgos ambientales.
El Cimari de Ramos Arizpe, que fue clausurado luego del incendio que consumió alrededor de 14 mil toneladas de residuos peligrosos, está diseñado para almacenar en total dos millones 707 mil 500 metros cúbicos de material peligroso y su capacidad de almacenamiento anual es de 24 mil 100 toneladas.
