La fuga de dos internos, considerados como peligrosos, del Centro de Readaptación Social de Puente Grande reveló ayer el caos al interior de la prisión estatal y de las autoridades locales.
Los reos Miguel Ángel Arellano Valencia y Manuel Ronsel Orozco Heredia emprendieron el camino a la libertad como a las 1:40 horas, mientras los funcionarios encargados de vigilar la seguridad en el estado siguen en el puente Guadalupe-Reyes.
En tanto, el gobernador de Jalisco, Emilio González, y el secretario de Seguridad, Luis Carlos Nájera, están fuera de la ciudad, según informaron sus colaboradores.
José González, director de los reclusorios estatales, dio a conocer los hechos, aunque no detalló cómo burlaron la seguridad de la prisión estatal.
‘Saltan barda’
Los reos huyeron por una barda cercana al área de Aduanas, informó la Secretaría de Seguridad Pública, en un comunicado. Sin embargo, esta primera versión de los hechos no precisa cómo lo hicieron. La barda tiene una altura aproximada de 5 metros y es custodiada por torres de vigilancia.
Al caos se suma una segunda teoría. Agentes investigadores de la PGJE aseguraron que los dos internos aprovecharon la oscuridad de la madrugada para comenzar su escape.
Salieron del dormitorio 11, en teoría el más seguro porque es donde están los reclusos de alta peligrosidad; pero en su trayecto tuvieron que abrir tres candados para poder abandonar dicha área.
Cuando llegaron a un módulo de vigilancia, se encontraron con dos custodios a los que amagaron con un cuchillo y un arma de fuego, luego los despojaron de sus uniformes, relataron los agentes extraoficialmente.
Los internos caminaron todo el tramo hasta la puerta de ingreso en donde pasaron como en su casa.
A las 3:30 horas, la SSP pidió apoyo a la Policía Investigadora y cerca de 40 elementos fueron citados en la gasolinera ubicada en el Nodo Revolución. De ahí, se dirigieron hacia la carretera libre a Zapotlanejo, sin que les indicaran el destino.
Una vez que llegaron a Puente Grande, se les informó de la evasión de los reos, por lo que apoyaron a los custodios de la Dirección General de Prevención y Readaptación Social en la búsqueda de los prófugos, pero sin éxito.
Hasta ayer en la tarde, permanecían en calidad de retenidos 5 custodios, 2 encargados de las torres de vigilancia, 2 que se presume fueron despojados de sus uniformes, 1 supervisor y 1 interno del Cereso.
Trascendió que hoy podrían solicitar el arraigo para continuar con las indagatorias.
Decomisa policía federal 269 kilos de cocaína en Mazatlán
La Policía Federal decomisó en la base de intercepción marítima de Mazatlán, Sinaloa, más de 269 kilos de cocaína provenientes de Perú, los cuales había arribado al lugar desde el pasado 30 diciembre.
Un contenedor con 269.45 kilogramos de cocaína fue localizado por agentes federales en coordinación con elementos del Ejército Mexicano, la Marina y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, luego de una revisión en el puerto marítimo de Mazatlán, informó la Secretaría de Seguridad Pública federal mediante un comunicado.
Los elementos de seguridad “ubicaron un contenedor con tablones de madera, mismo que en su interior contenía siete maletas con 254 paquetes de forma rectangular con un total de 269 kilos 45 gramos de cocaína”.
La dependencia explicó que, de acuerdo con informes de la agencia aduanal Hansawisnar, el cargamento provenía del puerto de Cayao, Perú, con ruta Manzanillo, Colima-Mazatlán, Sinaloa y arribó el 30 de diciembre de 2007.
