Señalan especialistas que las decapitaciones son una señal de que la delincuencia no tiene límites.
Durango se ha convertido en uno de los estados más violentos de la República Mexicana; el subprocurador Jurídico de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), José Santiago Vasconcelos, aseguró “no es gratis que veamos tanta violencia en Sinaloa, Chihuahua y Durango, la zona conocida como el triángulo dorado”, donde los delincuentes luchan por el control de los territorios.
La delincuencia organizada ha mostrado su poderío en varios estados y ya sea con escritos en cartulinas colocadas a un costado de un cadáver o con el solo hecho de asesinar a alguien de una u otra forma manda una clara señal ya sea a un grupo delictivo contrario, a las corporaciones policiacas y a la misma sociedad.
En el último año, específicamente desde el 29 de mayo de 2007 a la fecha se han reportado 11 decapitaciones en la entidad; dos de las víctimas habían pertenecido a la Policía Ministerial.
El 29 de mayo del año pasado, en Gómez Palacio, en la cuarta etapa del Parque Industrial, fue encontrado el cuerpo mutilado y decapitado de Jorge Alberto García Valenzuela, quien tenía 25 años y estaba en el interior de tres bolsas negras.
El 23 de septiembre en un ejido del municipio de Lerdo fue encontrado sin vida José de Jesús Luna González, de 24 años, a quien torturaron, mataron a balazos y posteriormente le cortaron la cabeza.
El 16 de octubre en la privada Elorreaga, en la Zona Centro de la capital del estado, también en bolsas negras encontraron descuartizado al ex agente de la Policía Ministerial Juan Ferman Ibarra y una semana después, en Gómez Palacio, decapitaron al también ex agente Pedro Bocanegra Torres.
Y aunque este caso no se relacionó con la delincuencia organizada se tiene el dato de una mujer que fue encontrada decapitada también en Gómez Palacio, quien llevaba el nombre de Rocío Arcuate García.
CASOS RECIENTES
El viernes pasado por la mañana en la entrada a la carretera a México, como a cinco kilómetros de la ciudad capital, a la altura del poblado Cristóbal Colón, fueron encontradas cuatro hieleras de unicel que contenían cabezas humanas.
Elementos de la Procuraduría General de Justicia del Estado trasladaron los restos humanos al Servicio Médico Forense (Semefo) donde iniciaron los trabajos junto a los peritos para identificar las cabezas.
Ese mismo día a las 20:00 horas encontraron otras dos hieleras con el mismo contenido en el ejido Contreras, como a dos kilómetros de donde hallaron las primeras cuatro.
Van cuatro identificados
De acuerdo con los datos proporcionados por la Secretaría General de Gobierno, designada como vocera de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Durango en los hechos relacionados con el crimen organizado, hasta el momento se han identificado cuatro de las seis cabezas halladas el pasado viernes en la entrada a la carretera a México.
Los nombres de los occisos son Carlos Misóforo Ríos Luna, de 31 años, vecino de la ciudad de Parral, Chihuahua; Eliseo Aguilar Sánchez, de 37, originario de Topia; Jacobo Enríquez Rodríguez, de 35, quien tenía su domicilio en el poblado El Purgatorio, municipio de Tepehuanes, y Estanislao Muñoz Uribe de 37, quien vivía en la colonia CNOP de Santiago Papasquiaro, Durango.
La misma Secretaría informó que ya se tenían avances para identificar por lo menos otra de las cabezas y que ya se habían presentado algunas personas que decían ser familiares de uno de los occisos que aún no se identifican, aunque de los cuerpos no se tiene idea todavía de su ubicación.