Con la victoria, el lagunero, avecindado en Ciudad Acuña, Coahuila, llegó a 42 victorias, de las cuales 38 han sido por la vía del nocaut. (Archivo)
Con gran velocidad y efectividad en su golpeo, el lagunero Marco Antonio “Veneno” Rubio se impuso por nocaut técnico en el quinto asalto al méxico-americano Alfredo “Freddy” Cuevas.
El combate finalizó debido a que el oriundo de Chicago, Illinois, terminó con el tabique nasal fracturado, producto de los poderosos golpes lanzados por el comarcano, que de esta manera se perfila para disputar el campeonato medio del CMB y OMB ante el ganador del combate que escenificarán hoy en Atlantic City, Kelly Pavlik y Gary Lockett.
Rubio, que salió en calzoncillo rosa con vivos en negro, tuvo en la esquina a Tiburcio García y a Rafael Díaz Covarrubias, por lo que demostró la preparación que tuvo por semanas en las montañas del Estado de México, con una excelente condición física en cada asalto que estuvo arriba del cuadrilátero.
En el primer episodio, el de Torreón tomó la iniciativa para castigar a su rival, que soportó la metralla y se dedicó a contragolpearlo, aunque en el segundo rollo Cuevas (plata con negro) salió a atacarlo, pero Marco Antonio mostró excelente defensa y el “bending” para esquivar los golpes.
Ya en el tercer asalto, el coahuilense capitalizó el trabajo de gimnasio, al entrar con el jab de izquierda y gancho de derecha, impactando así la cabeza de su adversario, que en dos ocasiones resbaló por la húmeda lona, situación que aprovechó para tomar un respiro.
Con el rostro enrojecido debido a la sangre que emanaba de sus fosas nasales, el “Veneno” se dedicó a castigar más a su rival, que aguantó de pie la gran cantidad de golpes del lagunero, que encontró casi siempre su objetivo, sobre todo en el rostro.
El réferi Steve Smoger, estuvo atento al desarrollo de las acciones, evitando cualquier intento de amarre y cabezazos, además de reconvenir a los protagonistas del pleito por los golpes bajos, durante la velada escenificada en el Sovereign Performing Arts Center.
Con la victoria, el lagunero, avecindado en Ciudad Acuña, Coahuila, llegó a 42 victorias, de las cuales 38 han sido por la vía del nocaut, con cuatro derrotas y un empate, mientras que su rival cayó a 26-10-1 (17 KO’s).
“Me sentí muy bien y tuve una defensa buena, cuando apreté puse en malas condiciones a mi rival, estoy listo para la pelea de campeonato mundial. Le mando saludos a toda La Laguna, en especial a Beto (el “Contador” Soto) y a Acuña. Arriba el Santos, que somos campeones de México”, dijo el efusivo peleador que salió con el puño en alto.
En el pleito semifinal, el invicto chihuahuense Urbano Antillon se sobrepuso a una caída en el segundo round para vencer en el sexto asalto al colombiano José Leonardo Cruz, quien terminó con el ojo izquierdo totalmente cerrado y le fue parado el combate por los médicos de la Comisión de Box de Pennsylvania.
