SIN ESPERANZA. Cuando los paramédicos de la Cruz Roja llegaron al lugar del accidente, Ignacio había muerto.
El exceso de velocidad y la falta de precaución fueron determinantes para que un hombre falleciera sobre la carpeta asfáltica de la carretera Gómez Palacio-Ciudad Juárez.
No se fijó
Ignacio Sánchez González, quien tenía 68 años y vivía en el ejido Dolores, Durango, se dedicaba a recolectar botes de aluminio y desperdicio de cobre para mantenerse.
Ayer, por la mañana, se encontraba cerca del ejido Las Playas, Durango. Revisaba los cestos de basura que están a un costado de la carretera federa, a la altura del kilómetro 22+300, agarró su bicicleta tipo balona para cruzar la carretera.
Sin fijarse que se aproximaba hacia él un carro, Ignacio se atravesó para buscar más botes.
No pudo evitarlo
Rumbo a Bermejillo, a toda velocidad, circulaba un vehículo tipo Sentra, color blanco, el cual era tripulado por María Elena Rivera Ávalos, de 18 años, con domicilio en Bermejillo, Durango.
Como el pavimento reflejaba el calor del sol, María Elena no pudo ver que Ignacio se atravesó varios metros adelante.
La joven, al percatarse que el ciclista cruzó la vía, intentó frenar, pero no logró esquivarlo.
Varios metros
El Sentra impactó con su parte frontal la bicicleta. Luego del impacto, el carro arrastró uno 30 metros a Ignacio.
La bicicleta fue proyectada a 20 metros de donde quedó el cuerpo de Ignacio, quien falleció casi instantáneamente.
María Elena perdió el control de su carro y se salió de la carretera hacia el lado derecho, el vehículo quedó entre la maleza de la cuneta.