SAN JUAN DEL RÍO | Francisco Javier es el agente de Tránsito más respetado y con su deseo de superación se gana el respeto de la sociedad.
San Juan del Río, Dgo.- Tiene el síndrome de Down y no es un obstáculo para servir a la sociedad, sino un reto para Francisco Javier Rodríguez Quiñones; como persona se caracteriza por su nobleza, valores y deseos de superación; como tránsito se gana el respeto de los conductores y pueblo en general.
El síndrome de Down es un grave trastorno genético que ocasiona retraso mental al igual que ciertas deformidades físicas, pero a Francisco eso no le impide dirigir el tráfico vehicular en los cruceros de San Juan del Río; es una persona con un gran sentido de la vida. Su optimismo es un ejemplo a seguir.
Un ejemplo.- Francisco Javier tiene mucho por enseñar a quienes nacen por la gracia de Dios sin problemas genéticos, pues muchos de éstos muestran más incapacidades partiendo desde el pesimismo para superarse en la vida que está llena de oportunidades, como lo muestra Francisco.
Para Francisco ser tránsito representa una gran oportunidad, es su pasión, lo demuestra en su diario quehacer con la emoción de un buen servidor público; se le hace difícil –porque ciertamente nada es fácil en la vida, todo requiere de un esfuerzo- pero nuestro personaje tiene la disposición, voluntad, valor y el gusto por ser útil.
Festejo.- Tiene tres años trabajando en la Dirección de Tránsito de San Juan del Río; hasta la fecha es el único agente respetado, porque realiza su trabajo bien, se encarga de acomodar profesionalmente el tráfico en este municipio, además de quitar a las personas mal estacionadas, y le obedecen.
Su área de trabajo es la entrada al parque, donde antes del derrumbe del puente principal hacía que los medios de transporte circularan correctamente.
El próximo 17 de noviembre, Francisco Javier cumplirá 31 años y se encuentra listo para su fiesta; sus padres Rafaela Quiñones y Francisco Rodríguez al igual que sus seis hermanos se sienten muy orgullosos de su persona por su capacidad para hacer las cosas bien, aun cuando el síndrome de Down provoca retraso de leve a moderado de quien lo padece.
Perseverancia.- La inteligencia es una característica que prevalece en Francisco Javier, además de la persistencia para alcanzar sus objetivos como ser un buen agente de Tránsito, como él lo comentó. La vida para Francisco lo es todo; por este motivo nunca está triste, es educado y a toda la gente le regala sus buenos modales y una sonrisa.
Es un muchacho con una gran historia y trayectoria, ya que a lo largo de su vida ha tenido varios triunfos, como ganar las Olimpiadas Especiales; es buen deportista, nada lo detiene, su fuerza de voluntad es grande. Algunos de los deportes en los cuales destaca son atletismo, ciclismo y basquetbol.
Soñador y enamorado.- También es un afortunado porque el amor le sonríe, y para mejor prueba muestra una de las fotos de su novia; luce contento, jovial, comenta que es muy feliz. Tiene grandes sueños, que seguramente los cumplirá pronto, como ser policía y casarse.
Su comida favorita: guisado de papa, picadillo verde y rojo, pero aclara, por supuesto, los frijoles charros.
Y el sueldo de Francisco Javier es bien remunerado y reconocido ampliamente en el Municipio.
No se priva de las fiestas: le gusta el baile, salir a la plaza, en fin, ama la vida y la vida le responde.
Jesse Edith Orozco
El Siglo de Durango
Ficha técnica
Nombre: Francisco Javier Rodríguez Quiñones.
Edad: 30 años de edad.
Originario: San Juan del Río.
Oficio: agente de Tránsito.
