Las deudas pueden convertirse en un serio dolor de cabeza cuando la cobranza extrajudicial cae en todo tipo de abusos.
Pero Efrén Enríquez, ex diputado, dice que hoy la Condusef es un “elefante blanco”
El Siglo de Durango
“Yo trabajo y por necesidad dejo a mis hijos solos en casa. Se me vino una de esas rachitas y me atrasé en mis pagos con Elektra, pero ellos van a cobrar y atemorizan a mis niños de que voy a ir a parar a la cárcel. Estoy desesperada”.
Se llama Ana María Balderas, vecina del andador Playa Suave del fraccionamiento Canelas de esta ciudad. Su caso es uno de tantos. El terrorismo psicológico usado en las cobranzas de bancos y tiendas tiene en la zozobra a un sinfín de familias en Durango.
Sin embargo, las esperanzas de enfrentar tales excesos y abusos parecen nulas. “En Durango la Condusef es un “elefante blanco”, pues su titular es juez y parte al mismo tiempo”, afirma el ex diputado federal Efrén Enríquez Ordóñez.
Por si fuera poco, las víctimas de este tipo de prácticas de extorsión y chantaje están a expensas de despachos de abogados que sólo buscan timar a clientes morosos de casas crediticias, pues les cobran pero no lo reportan a sus deudas, dijo Arturo Rodallegas, empleado del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE).
ABUSO
La señora Ana María Balderas consideró que las autoridades deberían hacer algo para frenar este hostigamiento que a su juicio es ilegal, ya que en su caso los métodos de cobranza de la mueblería a la que le debe han causado pánico en sus hijos.
“Aparte del problema con Elektra, me eché el compromiso de una enciclopedia en abonos para mis hijos. Pero, el problema es que el abonero estuvo yendo por los pagos y nunca los entregó. Ahora me dicen que de mil pesos que debía por esos libros, mi deuda asciende a cinco mil. No es justo”, señala la señora Balderas.
Su caso se complica porque en el trabajo prácticamente no puede ausentarse y ahora por su cuenta, se ve obligada a contratar un abogado para que la defienda de esta situación que le parece injusta. No sabe a qué otro lugar ir en busca de ayuda.
ELEFANTE
Efrén Enríquez, quien del 2001 al 2004 fue delegado de la Comisión para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) en el estado, lamentó que estos problemas vayan en aumento y que la gente en Durango no tenga opciones dónde quejarse o denunciar estas prácticas.
El organismo al que deberían acudir las personas con estos problemas es la Condusef, cuyas oficinas están en calle Hidalgo casi esquina con Aquiles Serdán. Sin embargo, Enríquez asegura que esta institución a nivel local se ha convertido en “elefante blanco”, es decir no le sirve a los usuarios de servicios financieros.
Criticó la función de Francisco Esparza Hernández al frente del organismio federal, ya que desde su llegada la Condusef –afirmó- ha mostrado total indefención al ser Esparza Hernández juez y parte, ya que tiene un negocio de venta de seguros ubicado por el Hotel Florida Plaza.
“Directamente él debería estar fuera. Él no debería ser delegado de la Condusef en Durango, debería estar impedido porque tiene un interés directo con las instituciones financieras, siendo que él debería estar del lado de los usuarios”, agregó.
Fraude
Entrevistado por El Siglo de Durango, Arturo Rodallega, licenciado en Derecho, expuso: “Trabajo en el Tribunal de Justicia y he visto casos donde es un mero engaño el que hacen los abogados o cobradores, ya que le quitan dinero a los clientes y no los reportan a las casas crediticias”.
El especialista en leyes dijo que se ha cometido el delito de fraude por parte de abogados o pseudo abogados, quienes llegan, intimidan, logran sacarle algo al cliente y sin embargo se lo quedan, no lo reportan a favor del cliente ese saldo.
Señaló que ese tipo de casos se han presentado con regularidad en el Tribunal de Justicia del Estado de Durango, pero no se trata de abusos de las casas comerciales, sino de los abogados con tal de sacarle dinero a los deudores.
