Pocos son los diputados que permanecen en sus lugares mientras participan en las sesiones. | José Juan Torres.
Pocos diputados ponen atención a lo que dice quien hace uso del micrófono; hablar por teléfono, conversar entre sí o atender a personas.
A las 11:15 del 17 de septiembre comenzó la sesión ordinaria del Congreso del Estado y desde ese mismo momento fue difícil ver a los diputados sentados en sus curules.
Entre el vaivén de la gente que entraba y salía de la sala, el murmullo constante de las personas que se encontraban sentadas como observadoras, el andar de los reporteros y las pláticas entre los propios diputados, llegó un momento en que pocos le hacían caso a los legisladores que hacían uso de la tribuna.
En la sesión efectuada ayer, el contexto fue el mismo que en las anteriores: ruido y desorden prevalecieron.
Relajados.- En términos generales se observó que son minoría los diputados que permanecieron en sus asientos y escucharon los asuntos que se trataron.
El presidente de la Gran Comisión, Jorge Herrera Delgado, platicaba con Rosauro Meza Sifuentes; las priistas Maribel Aguilera Cháirez y Alma Marina Vitela Rodríguez charlaban y reían.
Por el lado de los panistas algunos de ellos concedían entrevistas, otros hablaban por teléfono celular o revisaban alguna documentación.
La escena era recurrente. Los legisladores sólo cambiaban de lugar y así entablaban una nueva conversación o actividad, ya fuera con sus homólogos o bien con algunas de las personas que acudieron al Palacio Legislativo para hacer gestiones. En ocasiones optaban por salirse a las butacas para sentarse con quien había ido a buscarlos.
Parlamento. Entre el ir y venir de las personas entre los curules, se observó a Héctor Partida Romero, director de Comunicación Social del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), platicando con los diputados. Se reencontró con su ex compañero regidor, el ahora diputado José Luis López Ibáñez, con quien bromeó en reiteradas ocasiones.
Además, habitantes del poblado Calixto Contreras de Guadalupe Victoria se aglutinaron con los diputados Aguilera Cháirez y Fernando Ulises Adame de León para pedirles ayuda. Eso contribuyó a que hubiera más desorden.
Pocos en realidad son los que pusieron atención a las iniciativas que se leyeron. Sin embargo, votaron sin ningún problema cuando llegó el momento.
Las reglas a seguir
Durango. De acuerdo a lo que marca la Ley Orgánica del Congreso del Estado, a la sala del recinto parlamentario puede concurrir el público en general.
Los asistentes al salón de las sesiones deben guardar silencio, respeto y compostura y por ningún motivo pueden tomar parte en las discusiones, ni realizar manifestaciones que alteren el orden. De no ser así, se recibirá una sanción por el presidente, ordenando abandonar el salón a los responsables y si fuere mayor la falta se mandará a detener al que la cometiere y bajo la correspondiente custodia se pondrá a disposición de las autoridades correspondientes.
Ahora bien, los diputados tienen la obligación de asistir a las sesiones con toda oportunidad, de principio a fin.
DATOS
-Durante el desarrollo de las sesiones queda estrictamente prohibido a los diputados abandonar el recinto sin el permiso previo de la Presidencia.
-Los diputados, según lo marca la Ley Orgánica, sólo pueden dejar de concurrir a las sesiones por causas justificadas.